_
_
_
_

El Parlamento chileno exculpa a Pinochet

El ex dictador Augusto Pinochet obtuvo el jueves un triunfo que no por esperado supo menos amargo a los partidos democráticos chilenos. Por 62 votos contra 52 y una abstención, la Cámara de Diputados exculpó al general en el juicio político que se le seguía por su actuación como jefe del Ejército durante la transición. La clave de este resultado fue el carácter secreto de la votación, lo que permitió que una quincena de diputados de la Democracia Cristiana del presidente Eduardo Frei abandonasen la mayoría gubernamental y votasen con la derecha pinochetista.

La votación dividida de la Democracia Cristiana se saldó con un Pinochet victorioso ante sus adversarios, blanqueado, con un pronunciamiento de la Cámara que le confiere cierta legitimidad, y todo ello por el precio de conservar la estabilidad de la transición.Pinochet no asistió a observar el triunfo que le proporcionó la división oficialista y el respaldo sin fracturas internas de la derecha. Después de debatir si la votación era secreta, oír el informe de la comisión que recogía los testimonios y los descargos de la defensa del general, cada partido tuvo un tiempo para pronunciarse antes de que los diputados votaran.

La DC no pudo huir de su pasado. El mismo partido en el que la mayoría de los dirigentes respaldaron el golpe de Estado de 1973 contra el socialista Salvador Allende, con la excepción de 13 que se pronunciaron en contra a través de una carta, repitió ayer esta tajante división a la hora de juzgar a Pinochet. Para los adversarios de la acusación constitucional dentro del oficialismo, los cargos carecen de suficiente fuerza, apuntaban a la transición y no a las acciones de Pinochet en la dictadura, y una eventual aprobación podía afectar la estabilidad.

Dos diputados del grupo acusador de la DC denunciaron a camaradas suyos por presionar desde el Gobierno para frenar el juicio político al general. Para los acusadores, poner a Pinochet en el banquillo es un tema de principios, y los socialistas lo consideraron además un factor de unidad de la coalición gobernante. Estos últimos reprochan también a la DC por proponer en enero la acusación, embarcarlos en ella, y luego dividirse ante el voto.

Los partidarios de la acusación, socialistas, miembros del Partido por la Democracia (PPD) y el sector democristiano más izquierdista, se empeñaron a fondo para lograr revertir la suerte de lo que fue la crónica de una derrota anunciada, después que el ex presidente Patricio Aylwin afirmara en la víspera que si él fuera diputado, votaría en contra. Primero intentaron que la votación fuera pública, aunque la derecha había reunido 42 firmas de diputados, dos más de las necesarias para que fuera secreta.

Pero a petición de Pinochet, la derecha logró que la votación fuese anónima, lo que permite mejores condiciones para pronunciarse contra la acusación a los diputados democristianos no dispuestos a votar en forma pública que Pinochet es inocente de los cargos.

El segundo intento fue que las tres acusaciones contra Pinochet -dañar la imagen externa del país, pretender quebrantar el Estado de derecho y ofender la memoria de las víctimas de violaciones de los derechos humanos- se votaran por separado cada una, aprovechando que existen precedentes en otros juicios políticos. Rechazada, la iniciativa del socialista y vicepresidente de la Cámara baja, Jaime Naranjo, pretendía dar una oportunidad a los democratacristianos para votar contra los dos primeros cargos, pues esto implicaría juzgar la transición a la democracia, lo que algunos de ellos objetan.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_