Libra y dólar por las nubes
El mercado de valores ha entrado en una zona que tanto vale para justificar la consolidación de posiciones como la distribución de papel, aprovechando que el dinero sigue fluyendo con fuerza. El índice general de Madrid registró una diferencia de más de 16 puntos, el 1,83%, entre los niveles máximo y mínimo del día, demostrando así que no existe una tendencia definida, pero que el dinero llega sin complicaciones.Los mercados europeos también dedicaron la sesión a ajustar oferta y demanda a una situación ya conocida y para la que resulta difícil definir una trayectoria concreta. Los inversores habían apostado para cada país europeo por su inclusión en el euro y, una vez conseguido ese propósito, no queda más que retirar los beneficios y esperar noticias. En el caso español, la presencia de dinero parece restarle importancia a la retirada de algunos inversores y hasta permitió en esta ocasión recuperar posiciones al cierre hasta cerrar casi con ganancias. No obstante, si el mercado no asegura beneficios cada día la corriente compradora se torcerá, al igual que está sucediendo en el mercado de deuda. Las retiradas de beneficios afectaron casi por igual a la deuda española y a la alemana en lo que parece ser un proceso de retirada una vez logrados ciertos objetivos. La rentabilidad de la deuda española subió hasta el 5,09%, cinco centésimas por encima del nivel del pasado viernes.
Los mercados de divisas tampoco estuvieron tranquilos, con recuperaciones importantes en el dólar y en la libra. Un dólar costaba al cierre del mercado 156,59 pesetas, casi una peseta más que el viernes, mientras que la libra esterlina rozó las 263 pesetas, 2,25 más que el último cambio. La libra se ha situado así en el nivel más alto del año respecto de la peseta y parece marcar diferencias con el conjunto de divisas del área del euro. Así, la moneda británica superó los niveles máximos alcanzados el pasado verano frente al marco alemán y ayer cotizó a 3,0983 marcos, el nivel más elevado desde septiembre de 1989.
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