El PSOE reclama un plan de choque para los 85.000 analfabetos absolutos y funcionales de la capital

Unos 85.000 madrileños, cerca del 3% de la población de la capital, son analfabetos absolutos o funcionales (es decir, saben leer y escribir, pero no lo ponen en práctica). La estimación parte del grupo de concejales del PSOE en la Casa de la Villa, que ha presentado una proposición para potenciar la educación para adultos en las juntas de distrito. Hasta ahora sólo se destinan 15 millones anuales a este objetivo, una cifra que habría que multiplicar por 20, según el edil socialista Rafael Simancas.Las estadísticas sobre analfabetismo son muy poco precisas, sobre todo en lo relativo a analfabetos funcionales. A título orientativo, Simancas remite a una encuesta de 1992 en la que se cifra ba en 44.000 los iletrados absolutos. "Los funcionales pueden constituir una cifra similar; es un volumen de población significativo que se encuentra en el más completo olvido", apuntó.

La atención municipal a la educación de adultos se circunscribe a ocho de los 21 distritos capitalinos, donde se imparten rudimentos de lenguaje y matemáticas a 573 alumnos. El presupuesto sólo llega para pagar a los 11 profesores eventuales, que firman contratos entre octubre y junio. Según las cábalas de Simancas, la Concejalía de Educación y Cultura debería invertir 300 millones anuales para contratar a tres profesores especialistas por cada distrito.

El Ejecutivo local recuerda, por su parte, que la enseñanza no se encuentra entre sus competencias específicas. El trabajo que se hace con la gente mayor en las juntas de distrito ya excede las obligaciones municipales, matizó un portavoz de la concejalía. La última actuación municipal sobre este problema se remonta a 1990, cuando el entonces edil de Educación, Joaquín Álvarez de Toledo (CDS), puso en marcha un programa para "erradicar el analfabetismo en una década". En aquella campaña se contaba con aulas para adultos en casi todos los distritos. Ello da idea, según el PSOE, de que el actual equipo de gobierno "se quita el problema de encima". "Conozco de cerca el trabajo de esos educadores", concluyó Simancas, "y me parece conmovedor".