Los socialistas franceses piden a la derecha que no pacte con Le Pen

Tras su éxito electoral del pasado domingo, los socialistas franceses reclamaron ayer a las direcciones de los partidos de la derecha que impidan que sus electos locales se alíen con el Frente Nacional (FN) para conservar así las presidencias de los consejos regionales. "No estamos seguros de poder obtener las presidencias que hemos ganado en las urnas", dijo el primer secretario del PS, François Hollande. El dirigente socialista no dirigió sus sospechas contra los altos dirigentes nacionales derrotados que, como Édouard Balladur (RPR) o François Léotard (UDF), han optado Finalmente por retirar sus candidaturas, sino a barones locales como Jacques Blanc, presidente saliente del LanguedocRoussillon, que han proclamado su disposición a "no rechazar ningún voto".Muy diligente, en este momento en el que tiene entre sus manos el futuro político de no pocos notables locales, el FN multiplicó su envenenada oferta de pacto con la garantía de que, llegado el caso de un acuerdo, sus electos votarán "como un solo hombre" al candidato designado. La coalición de fuerzas integradas en el Gabinete de Leonel Jospin, singularmente PS, comunistas y verdes, se ha alzado con la mayoría, relativa en la casi totalidad de los casos, en 12 de las 22 regiones metropolitanas y aspira a sumar otras dos más, Poitou Charentes y Rhône-Alpes, en las que existe un empate virtual. La derecha, que gobernaba en 20 regiones, podría retener por sus propias fuerzas hasta una decena de presidencias, si bien la derrota en la PACA, la región situada en torno Marsella, y sobre todo en Île-de-France, bastión conservador desde hace 26 años en torno a París, tiene un efecto devastador.

Listas de notables

El último tramo del escrutinio, con la incorporación de listas de notables que han ido por libre en estos comicios, ha permitido a la derecha recuperarse un tanto y recortar la distancia con la "izquierda plural" que no supera el porcentaje del 37%. Los resultados definitivos podrían establecer una diferencia no superior a un punto, aunque François Hollande sostuvo ayer que la relación de fuerzas ha sido prácticamente la misma que en las legislativas de junio pasado. El fuerte ascenso de la extrema izquierda, que supera el 4% y tiene entrada en algunos consejos regionales, muestra que la alianza integrada en el Gobierno de Jospin ha dejado a la izquierda del PCF un terreno abandonado y que ese terreno ha sido rápidamente ocupado por los pequeños partidos situados fuera del sistema. El FN, que prácticamente repite su porcentaje último del 15,5%, ha reforzado su posición en algunos de sus bastiones tradicionales e incrementado notablemente el número de consejeros. Pese a que en Vitrolles, donde el FN, dueño de la alcaldía, obtuvo el 38% de los votos, no puede decirse que el FN haya aprovechado la ocasión.