Fomento descarta definitivamente que el tren veloz atraviese el valle del Lozoya

El tren veloz a Valladolid no atravesará el valle del Lozoya. Rafael Arias-Salgado, ministro de Fomento, confirmó ayer que el trazado que sacó a información pública en diciembre pasado quedará aparcado definitivamente en un cajón. "Se han presentado 6.653 alegaciones de particulares y 57 escritos de organismos e instituciones. En ellas hay razones de peso, y hemos tomado la decisión de no hacer el trazado que salió oficialmente a información pública", dijo el ministro.Tanto los pueblos de la sierra de Madrid, gobernados en su mayoría por el PP, como los de la vertiente segoviana, además de grupos ecologistas y partidos de la oposición (PSOE e IU) han protagonizado durante meses una dura polémica por los daños medioambientales que implicaba la propuesta de Fomento, hasta el punto de que el Gobierno regional decidió sumarse a las críticas y abandonar su apoyo inicial al proyecto del ministerio. "Ser dogmático en materia de infraestructuras no tiene sentido", declaró Arias-Salgado en la cadena SER.

La propuesta de Fomento pretendía acortar el tiempo de viaje en tren hasta Segovia y Valladolid con un trazado que salía de Madrid en paralelo a la autovía de Colmenar Viejo por el corredor de la línea Madrid-Burgos. A partir de Colmenar continuaba hacia la sierra de Guadarrama, cruzando el valle del Lozoya con una secuencia de tres túneles, situados en San Pedro, Miraflores y La Peñota. A la salida de este último túnel, ya en la vertiente segoviana de la sierra, el trazado discurría paralelo al norte de la carretera N-110 hasta la primera parada de la futura vía, situada a tres kilómetros de Segovia.

Las alegaciones presentadas inciden en los daños ecológicos que la nueva línea férrea puede producir a un lado y otro del macizo montañoso que conforma la sierra de Guadarrama. En el valle del Lozoya, porque entre los túneles (con una longitud prevista de 9,2, 11 y 8,6 kilómetros, respectivamente) discurrían 14 kilómetros de vía a cielo abierto. Este trazado produciría un efecto de barrera que partiría en dos una de las zonas más protegidas de la Comunidad.

En Segovia, las alegaciones incidían en los posibles perjuicios a las explotaciones ganaderas de la zona y en el deterioro que podían sufrir monumentos románicos, como la iglesia de Sotosalbos, en una zona que ha apostado por el turismo rural para su desarrollo.