Cuatro empresas europeas se repartirán 120.000 millones del programa Eurofighter
La empresa española Indra (63% de capital público), junto con la británica TTS UK, la alemana Atlas y la italiana Meteor, negociarán esta semana con el consorcio Eurofighter -que integran Alemania, Reino Unido, España e Italia- la constitución de una sociedad conjunta (joint venture) para fabricar los simuladores de vuelo del avión de combate europeo Eurofighter 2000. Está en juego el reparto de 120.000 millones de pesetas en 10 años.
La carrera por el apetecible contrato no ha acabado, pero dos empresas, la española Indra y la británica TTS-UK -filial de francesa Thomson- se han colocado en posición ganadora. La razón es que ambas han superado las calificaciones técnicas requeridas por el consorcio multinacional para fabricar el simulador de vuelo, denominado ASTA, del futuro avión de combate europeo.Por el camino han quedado las empresas estadounidenses y canadienses. Dos elementos han pesado en la elección de las firmas europeas: la experiencia acumulada (Indra participa, por ejemplo, en la fabricación de simuladores para el avión de la US Navy Harrier Plus) y la decisión, política, de primar a fabricantes europeos. En este último campo, fuentes al tanto de la operación destacan la labor diplomática llevada a cabo por el Ministerio de Defensa español.
La constitución de la sociedad conjunta, en la que Indra y TTS aspiran al dominio, se llevará a cabo en el mes de junio, según fuentes de Defensa. Esta misma semana mantendrán negociaciones para avanzar en el diseño de la estructura jurídica de la nueva sociedad. En ésta, dada la elección de empresas, estarán presentes todos los países Eurofighter (Alemania, España, Reino Unido e Italia).
En Indra, cuya privatización está prevista para el próximo otoño, Thomson desempeña un papel de socio acompañante del proyecto (mantiene una participación del 24,9%). El presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Pedro Ferreras, cortó cualquier posible especulación sobre el papel de la empresa francesa en Indra tras la privatización al asegurar el pasado viernes que el futuro de Indra "no pasa" por la dependencia de Thomson.
