Deportes en frío

Comienzan los Juegos Olímpicos de Nagano (Japón), y con ello surge la envidia de ver cómo se deslizan por un tubo de hielo y sobre un trineo aerodinámico algunos deportistas, que alcanzan una velocidad superior a los 100 kilómetros por hora. Pero este deporte, llamado bobsleigh, está vetado en la región: el madrileño que quiere practicarlo ha de marcharse al extranjero.

No obstante, la Comunidad presenta una oferta variada de deportes de invierno, además del esquí, que puede ser suficiente para cubrir la demanda de losexigentes del ejercicio físico. La nieve, ahora abundante en la sierra, permite la práctica de diversas modalidades. La alternativa más parecida al esquí es el snowboard, un deporte que ha experimentado un importante crecimiento en los gustos de los madrileños. Entre el monopatín y la tabla de surf, el snowboard ofrece una gran variedad. Piruetas, saltos, pruebas crometradas o carreras eliminatorias son algunas de sus opciones.

En Madrid hay posibilidad de aprender tanto en la federación como en clubes privados. "En tres o cuatro días, cualquier persona puede bajar por las pistas más difíciles", señala el vocal federativo José Subrié. En la federación se imparten clases para un grupo selecto de competición y para gente que quiere iniciarse. Por 40.000 pesetas se incluye el entrenador, el billete (forfait) y la ropa. Para los que comienzan hay dos tipos de clases: particulares y colectivas. Las particulares cuestan desde 3.400 pesetas por hora con un solo alumno, aunque este precio disminuye cuando hay más personas en el grupo.

Los clubes privados presentan ofertas según la demanda. El Famara organiza cursillos de 10 horas como máximo, en grupos de cuatro a siete personas. Durante cinco domingos o cinco sábados y durante dos horas, un deportista ha de pagar 9.900 pesetas.

Patinaje sobre hielo

El patinaje artístico es otro deporte que se presenta como más fácil que el esquí. "Se practica en una superficie lisa en la que no hay barrancos ni árboles", apunta Cristina Sanz, profesora del Club de Hielo de Chamartín.El patinaje se puede practicar en los palacios de hielo de Majadahonda o Leganés y en los clubes privados Diamonds (Aluche) y Encinas de Boadilla. En todos hay escuela, excepto en el de Aluche. En Majadahonda hay unos 500 alumnos, mientras que en Leganés son unos 300, y en Chamartín, unos 80. Las clases suelen ser de una a dos horas semanales. Los precios oscilan entre las 5.800 pesetas mensuales en Majadahonda, las 6.000 de Leganés o las 7.000 de Chamartín.

El hockey sobre hielo es deporte estrella en Nagano. En Majadahonda se realiza un esfuerzo por potenciarlo. Existe una escuela de 175 alumnos, en la que jugadores extranjeros, sobre todo escandinavos, enseñan a quien lo desee. Además tienen las referencias del equipo senior, que está realizando un extraordinario Campeonato de Liga. De esta forma se ha conseguido que un equipo femenino que comenzó en enero de 1997 se mida a clubes con mayor tradición, como el Gasteiz, al que derrotó por 12-1. En el Club de Hielo de Majadahonda se han formado equipos desde benjamines hasta veteranos. Las clases de hockey se pagan, junto a las de patinaje, por 2.000 pesetas más. En Leganés también existe la sección de hockey.

Otras modalidades deportivas de invierno son el esquí de fondo y el esquí de travesía. La principal diferencia es que el de fondo se practica sobre un circuito, mientras que el segundo es un recorrido sin limitaciones, en el que se busca un disfrute de la naturaleza. El veterano club Real Sociedad Alpina de Peñalara es buen lugar para iniciarse.

Por último, desde este año se están potenciando las carreras de trineo con perros. Rosa María Moreno es la vocal de la federación y tiene como principal objetivo completar una Liga madrileña con una segunda etapa en el puerto de Somosierra (lugar ideal para los practicantes de este deporte). Ya se disputó una primera carrera en diciembre.