El PSOE acusa al alcalde de Granada de incurrir en incompatibilidad

Todos los partidos representados en el Ayuntamiento de Granada, incluido el PP, manifestaron ayer su satisfacción porque el alcalde de la ciudad, Gabriel Díaz Berbel, haya convencido a su hijo para que no acepte la dirección de Inagra, la empresa concesionaria del servicio de limpieza cuyo contrato fue prorrogado por 10 años sin mediar concurso. Pero el conflicto no se ha zanjado porque el PSOE acusa ahora al alcalde de incurrir en incompatibilidad de sus cargos públicos por presidir el consejo de administración de Inagra

El grupo municipal socialista de Granada pidió la anulación de todas las decisiones adoptadas entre el Ayuntamiento y la empresa de la limpieza al considerar que Díaz Berbel ha incurrido en incompatibilidad al simultanear desde finales de 1995. sus cargos de alcalde y senador con el de presidente del consejo de administración de Inagra, empresa que ha pertenecido a las multinacionales BFI y Aguas de Lyon.El PSOE ha ampliado la moción que presentó el lunes para revocar la prórroga del contrato con Inagra; ahora quiere además que se dejen sin efecto "todas las actuaciones" adoptadas entre el municipio y la concesionaria, ya que, a su juicio, "siendo Díaz Berbel presidente de Inagra no puede contratar con el Ayuntamiento de Granada".

Díaz Berbel fue designado presidente del consejo el 11 de diciembre de 1995. Los socialistas extienden la incompatibilidad a la condición de senador de Díaz Berbel. El pasado mes de julio, la Comisión de Incompatibilidades de la Cámara Alta remitió una carta al alcalde de Granada en la que manifestaba que "la titularidad de cargos en órganos de gobierno de organismos y empresas que gestionen servicios municipales" sólo es compatible "cuando dicha titularidad derive de la condición de miembro de la respectiva corporación local y no pueda disociarse de ella".

De otro lado, PSOE e IU consideraron ayer la renuncia del hijo del alcalde Eugenio Díaz Ibáñez, al puesto de director general de Inagra como resultado del rechazo mostrado por la sociedad, la oposición política y la dirección del PP y no como una decisión espontánea del alcalde de Granada. "Es una victoria de la sociedad granadina que ha puesto coto a una práctica de nepotismo que llevaban a cabo el alcalde y sus concejales. No aceptamos la justificación de Díaz Berbel a la renuncia, porque ha tenido tiempo de adoptarla antes en su doble condición de alcalde y de presidente de Inagra", dijo Antonio Cruz, portavoz del grupo Socialista.

Cruz añadió que entendía que el portavoz municipal del PP,César Díaz, no quisiera ayer comentar la renuncia del hijo del alcalde ya que su hermano trabaja en la empresa del agua potable, que recientemente ha sido privatizada en parte. También recordó los otros casos de personas vinculadas al alcalde que trabajan en el Ayuntamiento o en empresas vinculadas a éste.

Mientras, el grupo municipal de IU, a través de su portavoz, Baltasar Garzón, dijo que la decisión de Gabriel Díaz de dar marcha atrás "ha sido obligada por su propia formación política cuando el escándalo ha llegado al ámbito nacional, lo que significa una victoria entrecomillada del PP y una derrota del alcalde". Garzón responsabilizó a Díaz Berbel de todo lo ocurrido ya que debería haber calculado que la contratación de su hijo "representaba una enorme falta de ética política tanto del propio alcalde como del PP".

IU duda que el PP vuelva a nominar a Díaz Berbel como candidato para las próximas elecciones municipales, a pesar de que la decisión fue adoptada recientemente. La dirección del PP de Granada divulgó ayer un escueto comunicado en el que señala que la renuncia de Eugenio Díaz Ibáñez es "acertada". El presidente provincial, Juan de Dios Martínez Soriano, dijo que la decisión es "correcta y acorde con los principios de ética y transparencia en la gestión de los cargos públicos que siempre ha defendido y sigue defendiendo el PP".