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LA CRISIS DE LA FISCALÍA

CiU censurara en el Congreso a Cardenal y Fungairiño por sus opiniones sobre las dictaduras

Convergència i Unió, principal aliado parlamentario del Gobierno del PP, propondrá al Congreso que se exija al fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y al fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, que rectifiquen sus manifestaciones justificatorias de los golpes militares en Chile y Argentina y del terrorismo de Estado que practicaron ambas dictaduras militares. Aunque explícitamente no reclamará la destitución de los fiscales, CiU considera que ésta debería producirse si esa rectificación no se produce. Coalición Canaria pidió ayer a Cardenal que considere presentar su dimisión.

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La proposición no de ley no estaba ayer definitivamente redactada, a pocas horas de que acabe el plazo para hacerla llegar al registro del Congreso. La iniciativa de CiU se suma a las presentadas por el PSOE y por los diputados del grupo mixto Cristina Almeida (PDNI) y Joan Saura (IC).El portavoz de Justicia de Coalición Canaria en el Congreso, Luis Mardones, pidió a Cardenal que dimita: "La situación es de tal deterioro que alguien tiene que brindar una solución, y una de ellas podría ser que el fiscal del Estado presentara su dimisión, dada la falta de credibilidad que en estos momentos evidencia".

En el borrador inicial de CiU figuraba la reclamación explícita de que el Gobierno destituyera a ambos fiscales si no rectificaban sus afirmaciones, pero en las últimas horas esa expresión había desaparecido y se estaba redactando el párrafo final de la pro posición. "Pedir directamente el cese resultaba muy fuerte", se justificaba ayer un diputado de CiU.

El secretariado permanente de Convergència y el Comité de Gobierno de Unió dieron ayer su visto bueno a la proposición no de ley sobre los fiscales, no sin antes haber alterado su redacción inicial elaborada por el grupo parlamentario, suavizándola.

Garzón y García-Castellón

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La proposición constará de varios puntos. Se condenarán claramente las dictaduras chilena y argentina; se mostrará la solidaridad de la Cámara con las víctimas de la represión militar; se apoyará la conveniencia de crear un Tribunal Penal Internacional que persiga estos crímenes; se mostrará respeto con la actuación de los jueces de la Audiencia Nacional (Baltasar Garzón y Manuel García-Castellón) que han abierto sendos sumarios por la desaparición de españoles bajo aquellas dictaduras, aunque sin pronunciarse sobre si la justicia española es competente o no para perseguir esos crímenes, y finalmente se reclamará la rectificación de los fiscales Cardenal y Fungairiño.Este último punto es el que, ayer tarde, estaba más en el aire. Probablemente CiU calificará de "equívocas" y "confusas" las expresiones contenidas en los informes de ambos fiscales -Fungairiño consideró los golpes militares una mera "sustitución temporal del orden constitucional" destinada a "subsanar las insuficiencias de que este orden constitucional adolecía para mantener la paz pública", y Cardenal le apoyó y relacionó lo sucedido en Chile y Argentina con lo dispuesto por la Constitución Española para cuando se declara el estado de sitio o excepción- y reclamará que ambos expliquen si apoyan o no esas dictaduras y que condenan de forma inequívoca lo sucedido en ambos países. Se trata, señaló ayer un diputado de CiU, de una "salida en positivo". Se les da la oportunidad de rectificar. "Si es que piensan de verdad lo que han escrito, que se vayan o les echen", agregó.

Los nacionalistas catalanes niegan que esta iniciativa suponga una rectificación a la posición mantenida el pasado 20 de enero, cuando sumaron sus votos al PP, PNV y CC para rechazar la propuesta del PSOE de celebrar un pleno extraordinario del Congreso durante este mes de vacaciones parlamentarias para debatir la propuesta socialista de destituir a ambos fiscales. Como máximo admiten que, una vez más, ha fallado su política informativa.

"Una cosa es que considerásemos improcedente la pretensión del PSOE de suspender las vacaciones parlamentarias de la Cámara, cuando este asunto podría haberse abordado en noviembre o diciembre, y otra que aceptemos sin más las barbaridades de Cardenal y Fungairiño", señalaron fuentes parlamentarias de CiU. "Deberíamos haber explicado nuestra posición el mismo día en que la Diputación Permanente rechazó la propuesta del PSOE", se lamentó otro diputado nacionalista.

A finales del pasado año, CiU se arrepintió de haber votado a favor de la toma en consideración de un proyecto de ley del Gobierno que restringía los derechos de los asilados políticos en España. Los nacionalistas catalanes compensaron su voto con el anuncio de que presentarían tantas enmiendas al proyecto que éste saldría de las Cortes totalmente distinto a como había entrado.

La iniciativa del grupo nacionalista se ha adoptado sin negociarla previamente con el Gobierno o con el PP, explicó ayer el portavoz adjunto de CiU, Josep Sánchez Llibre. CiU espera que, en los términos en que la propone, el Grupo Popular no podrá negar su apoyo a la proposición no de ley Fuentes nacionalistas manifestaron desconocer la actitud que adoptará el Grupo Socialista.

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