El conjunto histórico de Nuevo Baztán sufre dos años de abandono

El conjunto histórico de Nuevo Baztán, compuesto por un palacio, una iglesia, una lonja y un centro artesanal, agoniza sin que el Gobierno del PP repare el derrumbe de tapias y el deterioro general. El anterior Gobierno socialista gastó cerca de 400 millones entre 1989 y 1992 para reformar este espacio, declarado monumento histórico artístico. El diputado socialista Juan Antonio Ruiz-Castillo, acusa al PP de arruinar el monumento.

Un viejo conflicto jurídico mantiene a las autoridades públicas alejadas del palacio. Hace más de un año, cuando se derrumbó una parte de la tapia de piedra del conjunto histórico-artístico, el Ayuntamiento de Nuevo Baztán, gobernado por el PP, requirió por carta a Banesto para que reparase los daños.El banco replicó que el inmueble no era suyo, pues lo había cedido a la Comunidad de Madrid en 1989. Dicha cesión, firmada por Mario Conde, entonces presidente de Banesto, y el socialista Joaquín Leguina, nunca se llegó a escriturar.

En diciembre pasado, Banesto comunicó al consejero de Educación y Cultura, Gustavo Villapalos, su intención de firmar la escritura a favor de la Administración regional.

Mientras tanto, la tapia del espacio histórico-artístico no se ha, reparado y por el agujero abierto tras el derrumbe del muro se puede acceder a algunas instalaciones ruinosas. El palacio vale 4.000 millones de pesetas, según la tasación oficial.

El diputado socialista Juan Antonio Ruiz-Castillo demostró la agonía del monumento con un mural de fotografías tomadas en diciembre pasado. Ruiz-Castillo denunció la "desidia" de los populares y refrescó su memoria: "En junio pasado, el director general de Patrimonio Cultural, José Miguel Rueda, aseguró que su departamento iniciaría en breve las obras de rehabilitación en el conjunto histórico-artístico, y que si no lo habían hecho antes era porque no se había resuelto el problema de la inscripción de la finca a nombre de la Comunidad". "También contó Rueda", continuó Ruiz-Castillo, "que los problemas jurídicos ya se habían resuelto mediante la entrega de las llaves del palacio por parte del Ayuntamiento de Nuevo Baztán a la Comunidad. Pero estamos en enero y la situación no ha cambiado".

La Consejería de Educación y Cultura encargó en julio de 1996 al abogado Antonio García Trevijano que resolviese los problemas jurídicos que impedían la inscripción del conjunto palaciego a nombre de la Comunidad de Madrid. 'Pues bien, García Trevijano cobró 15 millones por un informe de seis o siete folios y las cosas continúan igual", sentenció ayer el diputado socialista Ruiz-Castillo.

Claroscuros

"Han existido muchos claroscuros en las gestiones de García Trevijano y nos preocupa que algunos de esos claroscuros acaben siendo terroríficamente negros. Por ejemplo, el abogado García Trevijano contactó con Mario Conde y con Arturo Romaní, que ya no tienen ninguna responsabilidad en Banesto, para tratar sobre el contencioso de Nuevo Baztán, en lugar de hablar con los actuales directivos del banco. Una gestión dantesca y sospechosa", dice Ruiz-Castillo.

El diputado socialista registrará en los próximos días varias iniciativas parlamentarias para que el Gobierno regional explique su inactividad ante el deterioro del palacio de Nuevo Baztán y la situación registral de la finca. "Tengo entendido que Banesto ha solicitado que se separe una parte del conjunto histórico-artístico, que actualmente se utiliza como olivar, antes de proceder a firmar la escritura a favor de la Comunidad de Madrid. Sospechamos que tras esta petición puede ocultarse una maniobra especulativa para construir chalecitos en el olivar", señaló Ruiz-Castillo.

El diputado socialista también recordó que el contrato de García Trevijano no había pasado los filtros legales de la Intervención General de la Comunidad, por lo que tuvo que ser convalidado por el Consejo de Gobierno. "Todo un símbolo de honestidad y transparencia", ironizó Ruiz-Castillo.