Un puente provisional sustituirá al destruido por la plataforma a la deriva

, Dentro de un mes se podrá llegar de nuevo a Ferrol (A Coruña) por el puente de As Pías, destruido en unos 100 metros en la madrugada del martes pasado al chocar con él la plataforma petrolífera Discoverer Enterprise, que quedó a la deriva tras romperse sus amarras a causa del temporal. Así lo afirmó ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Juan Miguel Diz Guedes, quien indicó que se hará a través de una estructura metálica provisional. Al tiempo, confirmó la intención del Ejecutivo de construir otro, de doble calzada.

La declaración del delegado del Gobierno, Juan Miguel Diz Guedes, zanjó ayer las especulaciones -incluidos pontones militares al estilo de los empleados en el conflicto bélico de la antigua Yugoslavia- respecto a cómo restablecer cuanto antes la normalidad en los accesos a Ferrol. "Hoy, técnicamente, todo es posible", añadió el alcalde, Juan Blanco (PP), para insuflar optimismo en tomo a la viabilidad de la estructura metálica provisional.A su vez, el propio ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, se refirió ayer a un nuevo puente como la solución "más probable" que maneja su departamento para sustituir definitivamente al siniestrado, informa Charo Nogueira. Según puntualizó, los técnicos están evaluando los daños sufridos en el de As Pías para ver si es posible aprovechar algunas de sus infraestructuras, pero las impresiones sobre ello son pesimistas.

Según Arias-Salgado, el nuevo puente, que "sería difícil que estuviese construido antes de un año", tendría doble calzada, lo que incrementaría su coste en un 20% o un 30%. Una inversión que "merecería la pena", reflexionó, para evitar "el calvario" de bordear la ría. El próximo viernes, indicó, llevará al Consejo de Ministros "la propuesta de un crédito extraordinario o de una transferencia de créditos para poder empezar el proyecto y la obra de la manera más rápida posible". Asimismo, en esta reunión planteará la aprobación del tramo de autovía Ferrol-Narón-Fene, de conexión con la del Atlántico.

Mientras tanto, Santiago García, el director de Astano, la constructora de la plataforma petrolífera Discoverer Enterprise, manifestó ayer que su factoría no se considera "ni responsable ni negligente" en relación con lo sucedido y enfatizó que "se evitó una desgracia mayor gracias a la pericia de los equipos del astillero".

El buque, que no presenta daños significativos, podía resistir vientos de hasta 110 kilómetros por hora -se superaron en la madrugada del martes- con su amarre convencional, dijo, y hasta de 200 con el de emergencia, que no pudo ser habilitado a tiempo porque ese proceso dura seis horas.

No obstante, Alternativa Independiente, una organización sindical escindida de CC OO, denunció ayer que el amarre era insuficiente para facilitar el funcionamiento de las grúas, que se deslizan por raíles paralelos a los muelles, y que el barco no estaba lastrado.

Mientras que los portavoces del BNG, Xosé Manuel Beiras, y del PSdeG-PSOE, Emilio Pérez Touriño, reclamaban una reunión urgente de la Diputación permanente del Parlamento gallego e instaban la declaración de zona de emergencia y excepcionalidad para la comarca, el vecindario trató ayer de adaptarse al caos, particularmente en el tráfico.

Las vías de acceso a Ferrol se congestionaron pese a la presencia de dispositivos especiales de la Guardia Civil y las policías locales. La principal carretera, la de Castilla, bordea la ría y es más bien una travesía urbana por Narón, Neda y Fene, municipio este último que permanecerá al menos 15 días sin agua potable. Más de 40.000 vehículos emplearon un promedio de una hora para recorrer sus 14 kilómetros con una treintena de semáforos. Muchos trabajadores optaron, como alternativa, por recurrir a las lanchas entre Mugardos y Ferrol. Además, Renfe habilitó un servicio extraordinario de trenes que mantendrá en el curso de los próximos días.