"Soy bastante escéptico con la unidad de los partidos contra ETA"

Miguel Buen Lacambra había sorteado muchas experiencias difíciles, pero ninguna como la que ha debido afrontar con el asesinato de su compañero de corporación José Luis Caso, del PP. El alcalde socialista se muestra escéptico respecto al futuro de unidad de los partidos. "Me temo que cuando pasen las Navidades, vamos a volver a las andadas y a hacer experimentos", afirma el veterano alcalde en alusión a los movimientos relacionados con la búsqueda de soluciones a la violencia de ETA.Pregunta. ¿Cómo está la corporación después de estos días convulsos?

Respuesta. La corporación está totalmente dolida pero, al mismo tiempo, la mayoría que la componemos está más unida que nunca. De hecho, el martes celebramos el pleno que se había suspendido con motivo del asesinato de José Luis y, por poner un ejemplo, se mantuvo la actitud de no entrar a debate con los concejales de HB.

P. ¿Y ellos lo intentaron?

R. Por supuesto que lo intentaron. ¿Cómo?, tratando de debatir temas como las ordenanzas fiscales a la vez que afirmaban que el equipo de gobierno da la espalda a la realidad. !Y encima son ellos quienes nos van a decir eso!

P. Rentería había dejado de ser un referente de la convulsa situación que vive el País Vasco. ¿Era sólo una apariencia? -

R. En cuanto al clima de algarada y de violencia en la calle Rentería, por suerte, ya no es lo que fue hace unos cinco o diez años. Pero ya he dicho en otras ocasiones que es fácil matar a alguien o quemar un autobús en un momento puntual. Hace un año 30 energúmenos encapuchados estuvieron sembrado el pánico por el centro de Rentería, y la víspera de Santo Tomás del año pasado quemaron por completo la Casa del Pueblo. Matar a José Luis les ha resultado muy fácil.

P. El 22% del electorado de Rentería vota a HB. ¿Esta fuerte implantación no se, traduce en tensión cotidiana?

R. No, sólo en tensión puntual, como le he dicho. Lo que le voy a decir puede resultar extraño a quien vive fuera de aquí, pero lo cierto es que la inmensa mayoría de la sociedad de Rentería está en los bares o en las tiendas y alternando en la Alameda mientras por el centro discurre una manifestación. Se puede convivir con este tipo de manifestaciones.

P. Usted se ha lamentado de que los concejales de HB no sólo no hayan condenado el atentado, sino que se hayan mostrado inmutables ante este asesinato. ¿No le han transmitido nada?

R. Absolutamente nada. Me consta que por lo menos alguno estuvo con Concepción Gironza el lunes y quedaron en hablar ayer por la mañana, pero ignoro qué querían transmitirle y tampoco espero que me digan nada.

P. El grupo de HB ha anunciado que se va a querellar porque se considera agredido por las declaraciones del nuevo concejal, Manuel Zamarreño, que les acusó de ser el comando de información de ETA.

R. Era de esperar que reaccionaran de esa manera. Cierta o no, la acusación es muy grave y ya sabemos que ellos utilizan toda la panoplia de leyes que emanan de esa Constitución que aborrecen pero que a la vez usan a su favor por muy siniestro y grotesco que nos resulte.

P. La unidad de los partidos frente al terrorismo es la única fórmula eficaz?

R. Soy bastante escéptico. No sé si para que los partidos consigan mantener su unidad de acción va a hacer falta que cada tres meses se asesine a una persona. Si es así, vamos mal. Me temo que, cuando pasen las Navidades, vamos a volver a las andadas, a hacer experimentos. Aquí debería haber un pacto que no se rompiese nunca, y el que lo hiciera debería ser expulsado del club de los partidos demócratas. Sucede con la prensa inglesa: no hay una ley que obligue a no mencionar determinados temas, pero sí un pacto entre los responsables de la prensa y se hace el vacío al que lo transgrede.

P. Su partido no ve con malos ojos la aparición de un "tercer espacio" como fórmula de integración de los radicales.

R. No mezclemos las cosas. El partido socialista ha dicho que no ve con malos ojos la propuesta de Elkarri como algo a estudiar y a debatir. Ésta es una cuestión y otra bien distinta el "tercer espacio", que se trata de una propuesta de alguien que está jugando a política sin pasar por las urnas, y me estoy refiriendo tanto a los sindicatos vascos como a la Iglesia, con todo el respeto que me merecen sus esfuerzos por la pacificación.