Menem pide al Mercosur soluciones conjuntas ante la crisis de los mercados

El presidente de Argentina, Carlos Saúl Menem, pidió ayer a los países socios del Mercosur (Mercado Común del Sur) una mayor convergencia de las políticas nacionales que evite soluciones individuales, con el objetivo de hacerse fuertes frente a la crisis de los mercados internacionales.En su discurso de apertura de la Cumbre de Presidentes de Mercosur, Menem afirmó ayer en Montevideo que "para nadie es un secreto y es cosa de todos los días la enorme crisis bursátil que vienen soportando algunos países del sudeste asiático". Una mayor integración del bloque evitará "cualquier efecto nocivo de las crisis externas", dijo.

Los cuatro países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) aprobaron ayer dar una mayor participación a Chile en las reuniones y la estructura institucional del bloque, lo que abre las puertas de la integración al único país habilitado por el Tratado de Asunción para ser miembro de pleno derecho.

Según lo aprobado ayer en Montevideo, Chile se coordinará con el Mercosur en sus relaciones externas cuando se trate de asuntos que afecten a ambas partes. Este país había sido en un principio excluido del bloque al tener una economía más abierta que sus futuros socios, embarcados en un proceso de superación de muchos años de dirigismo económico y financiero.

Por el contrario, cinco países de la comunidad andina (Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela y Bolivia) vieron ayer como se interrumpían hasta el próximo mes de febrero las negociaciones para suscribir un tratado de libre comercio con el Mercosur. La razón de este aplazamiento es que estos países han planteado exigencias "inaceptables" en los intercambios comerciales de productos agroindustriales.

La comunidad andina, con 104 millones de habitantes, tiene una capacidad de compra de 41.000 millones de dólares (casi seis billones de pesetas), de los cuales el 10% corresponden a productos agropecuarios y agroindustriales. La nueva cita para alcanzar un acuerdo persigue evitar una guerra comercial entre ambos bloques.

Por su parte, los Gobiernos de Brasil y Uruguay firmaron ayer un principio de acuerdo para desarrollar intercambios de energía eléctrica, concretar la futura integración en el sector y liberalizar sus respectivos mercados. Brasil y Uruguay se comprometieron a otorgarse mutuas autorizaciones para vincular las redes fronterizas.