Interior traslada a 15 etarras a cárceles más próximas al País Vasco

El Ministerio del Interior anunció ayer el inmediato cambio de prisión de 15 presos de ETA para acercarlos a localidades más cercanas a sus lugares de residencia, de acuerdo con la nueva política penitenciaria comprometida por el ministro Jaime Mayor, el 20 de noviembre, ante los integrantes de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento vasco. Interior advierte que se trata de un "acercamiento individualizado", una vez que se ha percibido el rechazo de cada uno de los beneficiados a los postulados de la banda terrorista.

El traslado inmediato de los presos de ETA afecta en realidad a 16 reclusos. Quince de ellos consiguen aproximarse a sus lugares de residencia -en algún caso se ha tenido en cuenta como factor determinante su situación sanitaria-, mientras que otro, Unai Idoyaga Altamira, que se encontraba en el centro penitenciario de Basauri (Vizcaya), es alejado, por sanción, al de Dueñas (Palencia). A otro dos reclusos más se les concede el tercer grado penitenciario, por el que sólo tendrán que ir a la cárcel a pernoctar. Con esta medida, Jaime Mayor empieza a desarrollar el compromiso adquirido con el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y el resto de los partidos del Parlamento de Euskadi de emprender una política penitenciaria "más activa". El anuncio se realizó ayer, 72 horas después de que ETA intentase asesinar al guardaespaldas de la concejal donostiarra del PP Elena Azpiroz y la víspera de la reunión entre el presidente del Gobierno y el secretario general del PSOE. El PNV ha reaccionado conierto escepticismo. Según Íñigo Urkullo, la medida es "positiva", pero espera que sea "un primer paso" y que la nueva política "se concrete en más gestos". Socialistas y populares acogieron la medida con satisfacción. Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida la calificaron de "insuficiente" y "oportunista".