El FBI cree que Aldasoro vivía de forma clandestina en Miami desde 1994

Los vecinos y compañeros de trabajo en Miami de Ramón Aldasoro Mangunacelaya nunca llegaron a conocer su personalidad de etarra, sino la que se había inventado bajo el nombre de Ramón Axpe. Esta personalidad era la de un buen vendedor de automóviles que en sus fines de semana jugaba al fútbol y bailaba en locales latinos. Como Ramón Axpe, Aldasoro incluso exteriorizó alegría por la boda de la Infanta Cristina e Iñaki Urgandarín, cuyo enlace vio a través de la televisión, en directo, junto a compañeros de trabajo.El FBI informó ayer que de la reconstrucción de las andanzas de Aldasoro en Miami se deduce que residía en la ciudad desde mucho antes de lo que inicialmente se pensó. Si al principio se habló de tres meses y luego de dos años, el FBI cree ahora que su llegada a Miami se produjo hace unos tres años, procedente de Monterrey (México). En ese periodo hizo frecuentes viajes entre Miami y Monterrey, donde, según decía, tenía una novia.

Aldasoro, detenido el pasado lunes por el FBI e internado en prisión al día siguiente por orden del juez Ted Bandstra, vivía en un piso del barrio de Kendall con dos vascos instalados desde hace tiempo en Miami. Trabajaba desde hacía un año como vendedor de coches en un concesionario de Toyota en la zona sur de Miami Beach. En su primer mes se ganó el título de "Vendedor Novato del Mes".

Sus compañeros de trabajo, hispanos en su mayoría, afirman que Ramón Axpe pasó muchos fines de semana con ellos, jugando al fútbol o saliendo por la noche a bailar a locales latinos, como La Covacha y Café Iguana.