Se casa una de las británicas juzgadas en Arabia Saudí
Una de las dos enfermeras británicas condenadas en Arabia Saudí por el asesinato de una compañera australiana ha contraído matrimonio, según el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido. Lucille McLauchlan, de 32 años, se ha casado con Grant Ferrie, obrero escocés. Se habían conocido hace cinco años en una discoteca de Dundee.La ceremonia matrimonial ha sido oficiada por un juez saudí de acuerdo con la sharia (ley islámica, vigente en el país). Los contrayentes brindaron con un cóctel de frutas, que fuentes occidentales calificaron de "champaña saudí", dada la prohibición de bebidas alcohólicas, y luego se les permitió encontrarse en privado.
McLauchlan está condenada desde el pasado septiembre a ocho años de cárcel y a recibir 500 azotes por complicidad en el asesinato de Yvonne Gilford, que apareció apuñalada en Dahran en diciembre de 1996. La otra acusada, Deborah Parry, de 39 años, aguarda aún sentencia judicial. Sin embargo, aunque podría ser condenada a muerte, se estima que ello no ocurrirá, toda vez que la familia de la víctima ha anunciado desde Australia que no solicitará esa pena, a lo cual tendría derecho según la ley saudí.
