Barajas pone en marcha hoy la completa reorganización interna de sus terminales

Barajas intentará demostrar hoy que la sopa de letras y números en que ha convertido su señalización es perfectamente digerible por los usuarios del aeropuerto. Desde esta misma mañana, no existen las tradicionales terminales nacional e internacional. Su nombre ha sido sustituido por T-1, T-2 y T-3. Además, los aparcamientos (los que antes se llamaban nacional e nternacional) se han convertido en P-1 y P-2. Los responsables del aeródromo han lanzado una fuerte campaña informativa y publicitaria para que los viajeros no se pierdan. Pero siempre quedan dudas.

La terminal de vuelos internacionales se denomina ahora T-1. Desde ella saldrán todos los aviones que tengan como destino un país extranjero, excepto los de Iberia que vayan a naciones que hayan firmado el Tratado de Schengen (Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Holanda, Italia y Luxemburgo). En la T-2, hasta ayer terminal nacional, se ubican los vuelos nacionales y los de Iberia con destino a los países firmantes del Tratado de Schengen. En la T-3, antiguo dique norte, se sitúan los aviones de Iberia que realizan el puente aéreo Madrid-Barcelona y los aparatos de menos de 50 viajeros que enlazan ciudades españolas (vuelos regionales).Como la memorización de todo esto puede resultar difícil, se han colocado unos paneles a la entrada de las terminales donde se explican los cambios.

Los pasajeros que lleguen a Barajas en coche deben tener claro dónde aparcan su vehículo. Cuando el avión parta de la T-2 o de la T-3, lo mejor es dejar el coche en el aparcamiento P-2. Cuando el vuelo parta de la T-1, el vehículo debe dejarse en el P-1. Si no se sigue esta norma, y dada la nueva distribución, desde el coche a la terminal habría demasiada distancia, y el pasajero terminaría harto de arrastrar sus maletas por medio aeropuerto.

Si el usuario se dirige en taxi a Barajas, lo mejor es comentarle al taxista en que compañía y hacia dónde se quiere viajar. Barajas ha repartido unos 10.000 folletos informativos entre los taxistas para que dejen correctamente a sus pasajeros.

Para casos desesperados, queda un último recurso. Marcar el 900 150 300. No es el teléfono de la esperanza, pero dan muy buena información sobre la nueva reordenación del aeródromo.