Un periódico descubre mas donaciones millonarias a Blair durante la última campaña electoral

El primer ministro británico, Tony Blair, tuvo poco tiempo para saborear la donación de un millón de libras esterlinas (en torno a 250 millones de pesetas) con la que un emporio gastronómico está intentando ayudar al Partido Laborista a salir de sus enredos con los patrocinadores de Fórmula 1 y la industria tabaquera. Apenas unas horas después de que el multimillonario jefe ejecutivo de la cadena Planet Hollywood, Robert Earl, anunciara la donación, él semanario The Sunday Times dijo ayer que los laboristas recibieron contribuciones preclectorales secretas por valor de varios miles de libras de cuatro fabricantes extranjeros de armas a través de una organización creada por un amigo de Blair.

Otro semanario, The Observer, registró por su parte, mediante una encuesta, el daño que está sufriendo un Gobierno que llegó al poder el pasado mayo prometiendo poner fin a los escándalos que caracterizaron las gestiones de los conservadores. Actualmente, señaló el rotativo, sólo un 17% de los británicos tiene completa fe en Blair. Los tories podrían sentirse reivindicados: dos semanas después del estallido de la controversia de Fórmula 1, el Gobierno de Blair permanece enfangado en la cuestión de las contribuciones a los partidos, mientras la popularidad de Blair va en franco declive.

Maniobra controvertida

La controversia estalló al descubrirse que Bernie Ecclestone, el presidente de Fórmula 1, había donado un millón de libras a la campaña electoral del Partido Laborista en una maniobra que la oposición vinculó inmediatamente a la autorización de Blair para que las tabaqueras continúen promocionando el campeonato de esa categoría deportiva. Por recomendación del comité parlamentario de ética, los laboristas se comprometieron a devolver esos fondos, pero con un déficit de 4,5 millones de libras, no estaban en condiciones de hacerlo. Al rescate de Blair salió entonces Earl Planet Hollywood, apuntaban ayer comentaristas políticos, ha entrado en la órbita laborista. La cadena internacional de restaurantes, que recientemente abrió un local en Barcelona, cuenta como socios destacados con varias estrellas de la meca del cine, entre ellos Sylvester Stallone, Arnold Schwarznegger o el español Antonio Banderas. Hasta anoche el Gobierno no había formulado comentario alguno sobre la versión de The Sunday Times, pero no cabe duda que la información del semanario va a avivar el debate sobre las finanzas de los laboristas, principalmente porque Blair ha negado consistentemente haber recibido contribuciones del exterior' El dominical dijo que entre los contribuyentes extranjeros figura Thomson-CSF. El consorcio francés fue acusado hace algún tiempo de tratar de vender armamento a Irak. Citando a Robin Asliby, un prominente donante a la causa laborista y asesor de relaciones públicas del partido, el semanario citó además a las compañías norteamericanas Lockheed-Martin y Boeing, y a la firma francesa Trimarine. Ashby habría actuado como intermediario en esas donaciones. Por lo menos ocho compañías británicas de la industria militar también efectuaron contribuciones al partido, dijo el periódico. Una de ellas es British Aerospace, que en medio de una tormenta política en agosto pasado, obtuvo autorización para seguir vendiendo aviones Hawk y tanques ligeros Scorpion a Indonesia, recordó el dominical.Blair, que niega haber cometido irregularidades, acusó ayer a sus detractores de "decir tonterías" e instó a los británicos a que mantengan su confianza en el Gobierno. "Es una tontería cínica el sugerir que nos estamos desviando de nuestras promesas", declaró Blair a The Observer. Pero el mismo semanario señalaba en su editorial que es "demasiado pronto para confiar en Blair". Por segunda semana consecutiva, The Observer advertía que, contrariamente a sus promesas electorales, los laboristas están sacrificando ideales en aras del corporativismo. "¿Es acaso Blair un conservador 'por encargo' o un progresista cuya intención es funcionar con medios genuinos y nuevos? No podemos, honestamente, hacernos una idea", escribió el rotatativo.

Límites al gasto

La incógnita se ha ido extendiendo al propio campo parlamentario laborista, indignado por la decisión del joven primer ministro de mantener rígidos límites del gasto público impuestos por las anteriores administraciones regidas por los conservadoras. Muchos parlamentarios laboristas ya han anunciado que votarán decididamente en contra de proyectos elaborados por el Gobierno que contemplan una reducción de la ayuda económica para madres solteras y otras medidas que afectan a la Seguridad Social.