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Los vecinos de Nerva exigen seguridad y justicia tras los tres asesinatos

El silencio y los crespones negros en señal de duelo fueron ayer los símbolos empleados por más de medio millar de vecinos de Nerva para exigir justicia y más seguridad en la zona tras los tres asesinatos cometidos, en menos de 48 horas, la pasada semana en el pueblo. La marcha recorrió a mediodía de ayer las calles de la pequeña población enclavada en la cuenca minera de Huelva. Hombres, mujeres y niños, convocados por la Asociación de Mujeres Luna de Nerva y el Foro Cultural Cuenca Minera, caminaron durante media hora bajo un intenso frío, rebajado en ocasiones por ráfagas de sol, con la cabeza agachada y pasos cortos.La marcha, que partió de la Plaza de las Farolas escenario hasta ahora de numerosas concentraciones contra el vertedero de residuos tóxicos y peligrosos que se instala en el municipio estuvo encabezada por una gran pancarta en la que se podía leer "¡Basta ya!" y por un grupo de niños. La movilización contó con la presencia de los familiares de Ángel Gómez Pérez, de 65 años, una de las dos primeras víctimas asesinada a golpes, que no quisieron hablar sobre lo sucedido.

El alcalde de Nerva, el socialista José Villalba, y el resto de la corporación municipal no acompañaron a sus vecinos tras anunciar, días antes, que "actos como éstos pueden entorpecer las labores de investigación". La movilización, que se desarrolló sin incidentes y con una escasa vigilancia policial, finalizó con un minuto de silencio y un prolongado aplauso, tras la intervención de los convocantes. Francisco Casero, dirigente de la Confederación Ecologista Pacifista de Andalucía, que también participó en la marcha, aseguró que "lo que ha ocurrido en Nerva, un municipio con mucho paro, podría haber pasado en cualquier otro. A este pueblo no se le debe conocer por estas desgracias".

Único detenido

Mientras, en la prisión provincial de Huelva, permanece ingresado el único detenido en torno al caso, Francisco Javier González Rodríguez, alias El Legía. Un joven de 25 años que niega haber cometido los crímenes.Los vecinos de Nerva no están tranquilos porque consideran que El Legía no pudo acabar él solo con la vida de tres personas:"La Guardia Civil debe dar con otro implicado que también participó en las muertes. Que se haga justicia", manifestaba una mujer minutos antes de comenzar la movilización.

La población está atemorizada y se siente desprotegida, aseguró Ana Ramírez, presidenta de la Asociación de Mujeres Luna: "Hacemos una llamada a las fuerzas del orden porque queremos mayor seguridad. Nerva es un pueblo muy conflictivo como consecuencia de los problemas con la droga y esto debe cortarse desde la raíz. Un drogadicto, además de ser un enfermo, es un delincuente".

El pueblo recuperó la normalidad de una jornada dominical cuando finalizó la marcha. La Policía Judicial de la Guardia Civil mantiene abiertas diferentes líneas de investigación, sin que se hayan producido, por ahora, nuevas detenciones.

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