La Oficina Presupuestaria crítica que los cálculos se basen en "hipótesis apriorísticas"

El informe de la Oficina Presupuestaría esgrimido ayer por el PSOE es, como su nombre indica, un "análisis del documento Nuevo Modelo de Fuerzas Armadas" que el Ministerio de Defensa presentó hace un año ante el Congreso. A lo largo de 18 páginas, el informe de Barea, fechado el 27 de enero pasado, repasa y corrige los cálculos oficiales.Estima, por ejemplo, que el aumento de los gastos de personal derivado del nuevo modelo asciende a 97.313 millones de pesetas, lo que supone "5.296 millones más que el importe calculado por Defensa".

Por el contrario, rectifica a la baja los gastos de material, en un mínimo de 116.747 y un máximo de 175.121 millones. Aduce para ello que, si se acepta la fórmula de Defensa de fijar una proporción 50-50 entre gastos de personal y de material, habría que restar a los primeros los correspondientes al "personal en reserva, que no están relacionados con el armamento".

Esta fórmula, en todo caso, no le parece a Barea "la más adecuada". En sus conclusiones precisa que "los cálculos deben realizarse en base a una programación plurianual y no a hipótesis apriorísticas".

El punto más controvertido del informe se refiere a la estimación de los efectivos de las Fuerzas Armadas. Barea aboga por sustituir como hasta ahora 2,35 militares de reemplazo por cada nuevo profesional y por mantener la actual tasa de encuadramiento, proporción de cuadros de mando sobre el total de militares, en el 27,63%.

La conclusión es que los soldados profesionales deben reducirse a 100.000 (frente a los 120.000 que propone Defensa), mientras que el número de oficiales y suboficiales debe bajar a 38.178 (frente a los 49.720 que hay actualmente y quiere mantener Defensa).