Solzhenitsin crea un premio de literatura para escritores rusos

El escritor ruso Alexandr Solzhenitsin ha creado un premio de literatura que se otorgará anualmente, a partir de 1998, y que estará dotado con 25.000 dólares (cerca de cuatro milones de pesetas). Así lo anunció ayer Natalia Solzhenítsina, esposa del premio Nobel de Literatura de 1970, quien precisó que podrán aspirar al galardón sólo los escritores que vivan en Rusia y escriban en ruso. El premio podrá ser recibido sólo una vez y en casos especiales podrá ser compartido por dos personas.El Premio Solzhenitsin podrá recaer tanto sobre novelistas, poetas y dramaturgos, como sobre críticos o historiadores de la literatura, siempre y cuando, en palabras de Natalia Solzhenítsina, la obra laureada "tenga altos méritos literarios y suponga una gran aportación a la conservación y al cuidadoso desarrollo de las tradiciones de la literatura rusa". El jurado estará compuesto por SoIzhenitsin y su esposa, el profesor parisino y editor Nikita Struve, el escritor Valentín Nepóniniashchi y los críticos Pável Basisnki y Ludmila Saráskina.

El premio será financiado por los derechos de autor provenientes de Archipiélago Gulag, la espeluznante historia de los campos de concentración estalinianos. SoIzhenitsin fue expulsado de la URSS en 1974, precisamente después de la publicación en Occidente de esta monumental obra, y entonces decidió que todas las ganancias obtenidas con ella serían para ayudar a las familias de los prisioneros políticos soviéticos. Desde que la URSS desapareció, el dinero proveniente de Archipiélago Gulag ha sido utilizado para ayudar a la cultura rusa y a cerca de un millar de sobrevivientes de los campos de concentración comunistas, hoy enfermos y ancianos.

Solzhenitsin, de 79 años, está preparando un libro de memorias sobre sus 20 años pasados en el exilio. A estas memorias, según su esposa, les seguirán las reflexiones del escritor sobre lo que ha visto en Rusia desde que regresó en mayo de 1994. Solzhenitsin se ha mostrado crítico hacia la manera en que se han hecho las reformas en Rusia y en su última intervención pública, el mes pasado, denunció la decadencia de la cultura rusa en las últimas dos décadas.