El tábano del PNV
"El PNV está pagando el peaje político de defender el Estatuto en Madrid", dijo Arzalluz. Harto de las críticas que está recibiendo por su apoyo inquebrantable al Gobierno del PP, ayer pidió a todos los partidos vascos que se unan a la batalla por la ampliación de las competencias. Pero este intento de socialización de los reproches no lo comparten el resto de los partidos, que le recuerdan que el acuerdo con Aznar lo firmó el PNV."Durante 18 meses les hemos estado apoyando como una pared", aseguró Arzalluz, incluso en temas que, como dijo en Zarautz al principio del curso político, "no nos interesaban, como la ley del fútbol" Pero eso se acabó. Aunque sin acritud, el número uno del PNV dio el relevo también al respaldo sin condiciones al PP. "No hemos roto nada", declaró, "pero ahora habrá que negociar asunto por asunto". Y sólo cambiará el escenario "si cumplen la segunda parte del acuerdo y se sientan a negociar el régimen económico de la Segur¡dad Social, la recaudación de las cuotas del Inem, y todo lo demás que está pendiente".
Arzalluz advirtió a la derecha que en la pelea por el desarrollo del Estatuto de Gernika "vamos a seguir picando como un tábano, porque lo único que queremos es mandarnos a nosotros mismos. Iremos a negociar, pactaremos y daremos el apoyo, pero aquí mandamos nosotros", reiteró.
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