El 'comando Vizcaya' tenía bajo control al líder del PP vasco y al presidente de la Audiencia de Bilbao
El presidente de la Audiencia Provincial de Bilbao, Joaquín Giménez; el máximo responsable del Partido Popular en el País Vasco, Carlos Iturgaiz, y el concejal popular del consistorio bilbaíno Antonio Basagoiti, así como varios policías, habían sido sometidos a un estrecho seguimiento por los integrantes del comando Vizcaya, según se desprende de la documentación intervenida tras el tiroteo que la noche del martes posibilitó la desarticulación del, núcleo de ese comando. Tanto Iturgaiz como Basagoiti manifestaron ayer que no tienen previsto abandonar Euskadi pese a la estrategia de amedrentamiento de ETA y de su brazo político Herri Batasuna. "Si quieren que cojamos las maletas, no lo conseguirán", dice Iturgaiz.
"Es nuestra tierra, aquí vivimos y aquí seguiremos porque tenemos no sólo el apoyo del Partido Popular, sino de muchas personas, que es lo más importante. No somos héroes, pero tampoco víctimas, y estas alimañas se confunden si creen que con el amedrentamiento y el tiro en la nuca nos vamos a escapar", declaró Iturgaiz, presidente de los populares vascos.Uno de los dos activistas abatidos a tiros por la Guardia Civil llevaba consigo una agenda con datos de seguimientos realizados tanto a Iturgaiz como a Antonio Basagoiti, concejal de este mismo partido en el Ayuntamiento de Bilbao. Los investigadores están convencidos de que el comando Vizcaya iban a cometer "un atentado inminente".
La información sobre ambos, cuyos nombres se citaban, era extraordinariamente prolija y figuraba escrita por una mano de mujer. Los últimos datos anotados eran bastante cercanos al pasado martes, cuando se produjo el tiroteo en el que resultaron muertos los etarras Salvador Gaztelumendi y José Miguel Bustinza. Junto a este material, en los registros efectuados en varios de los pisos relacionados con este comando la Guardia Civil ha hallado información y seguimientos realizados por los activistas al presidente de la Audiencia de Bilbao, Joaquín Giménez, según fuentes de la investigación.
El nombre de este magistrado ya apareció en los papeles incautados al comando Vizcaya de ETA tras la detención de Oskar Barreras pocas horas después del asesinato del inspector de policía Luis Andrés Samperio, el pasado 24 de abril, en el barrio bilbaíno de Deusto. En aquella ocasión, Giménez fue informado por el ministro del Interior y, desde entonces, lleva escolta.
En el caso de Giménez, los activistas no habían realizado tantos seguimientos como a Iturgaiz, aunque el material era plenamente operativo para cometer un atentado. Junto a las anotaciones manuscritas sobre los políticos populares, la agenda contenía apuntes sobre los policías que escoltan a Iturgaiz, tales como su descripción física, movimientos, etcétera. Las fuentes informantes no pudieron precisar en qué lugar o lugares habían vigilado los etarras al líder de los populares vascos. Medios judiciales explicaron que los seguimientos realizados a Iturgaiz y a sus escoltas eran múltiples y especialmente minuciosos.
Iturgaiz mostraba ayer su "alivio" por la caída del comando, un alivio que es tanto personal como por el hecho de que se haya desarticulado un comando que podría haber "causado mucho daño" a muchas personas. "Te haces a la idea de que eres un objetivo de ETA, pero como cualquiera que no sigue su línea y la de HB", añadió. Fuentes policiales no precisaron si se variará o se reforzará el dispositivo de escolta que actualmente tiene el presidente de los populares vascos.
Iturgaiz fue informado de que era un objetivo del comando por el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, quien le llamó personalmente a primera hora de la mañana del miércoles. Mayor también comunicó al concejal Basagoiti que el comando había estado tras sus pasos. Ambos se mostraban ayer rotundos en asegurar que los terroristas no les van a echar de Euskadi.
Basagoiti, al igual que Iturgaiz, mostró su intención de permanecer en esta comunidad autónoma. "No me van a mover ni un ápice de las labores para las que me han elegido los bilbaínos y estos tíos no me van a echar, todo lo contrario. Si soy su objetivo, quizás es porque lo estoy haciendo bien", dice.
Antonio Basagoiti, cuya escolta será reforzada, abandonó el pasado agosto el jurado del concurso de fuegos artificiales de la Aste Nagusia bilbaína, del que formaba parte en su condición de edil de la villa, para no coincidir con el representante en dicho jurado de la comparsa Txori Barrote, vinculada a las Gestoras pro Amnistía. Algunos de los miembros de esta comparsa le habían amenazado días antes con la frase: "Tú, el de las gafas, te vamos a cortar el cuello y te vamos a matar".
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