La coalición de Kohl mide hoy sus fuerzas en las elecciones de Hamburgo

Algo más de 1,2 millones de electores de la ciudad-estado de Hamburgo, convocados hoy a las urnas para elegir el Parlamento regional, servirán de piedra de toque para medir las fuerzas del Gobierno de centroderecha en Bonn, coalición entre democristianos (CDU/CSU) y liberales (FDP), y de la oposición, formada por socialdemócratas (SPD) y Los Verdes. La elección de hoy en Hamburgo es la única en todo el año de un parlamento regional en Alemania y podría influir sobre la composición de la cámara alta, el Consejo Federal (Bundesrat), donde la oposición cuenta con mayoría. y bloquea algunos proyectos de ley del Gobierno.En principio, la elección de hoy en Hamburgo no permite sacar conclusiones sobre la correlación de fuerzas vigente en Alemania. Hamburgo es una gran ciudad, la tercera del país, con 1,7 millones de habitantes, y presenta características políticas especiales, como los 40 años de gobierno del SPD, y problemas específicos de su estructura urbana, como la elevada criminalidad, uno de los temas centrales de la campaña electoral.

No obstante, el hecho de ser la única confrontación electoral importante en 1997 y el agitado verano político, cuando falta poco más de un ano para las elecciones federales, convierten la elección de Hamburgo en un examen parcial para el Gobierno y la oposición.

Los sondeos pronostican que sólo tres partidos (SPD, CDU y Los Verdes) conseguirán superar la barrera del 5% y entrar a formar parte del futuro Parlamento de Hamburgo. Hace cuatro años se produjo un auténtico corrimiento de tierras político, cuando los dos grandes partidos SPD y CDU perdieron de forma escandalosa: casi un 8% los socialdemócratas y un 10% los democristianos. Saltó entonces la barrera fatídica del 5% un grupo curioso llamado En Vez de Partido (Statt Partei), que consiguió un 5,6% de votos y ha formado Gobierno de coalición con el SPD. Este antipartido no parece que vaya a repetir el éxito. La misma suerte parece que correrán los liberales (FDP) y la ultraderecha, en la que destaca Los Republicanos, que en 1993, con un 4,8%, estuvieron a sólo dos décimas de entrar en el Parlamento.