El Gobierno francés entierra, el proyecto de construir una nueva central nuclear
El Gobierno francés ha enterrado esta semana su proyecto de central nuclear en Carnet, en el estuario del Loira. Se trata de una victoria de los ecologistas, que desde 1977 luchaban contra el proyecto de la EDF (eléctricas) de instalar dos reactores de 1.200 megawatios en una zona de marismas.Francia es en la actualidad el país del mundo que consume más electricidad -81,4%- de origen nuclear. La opción fue adoptada en 1973 por el Gobierno y la EDF ante el alza del precio del petróleo. Un deseo de asegurar la independencia nacional en materia de energía justificó una decisión que hoy es cuestionada.
La central de Carnet debía ser la primera de las equipadas con el nuevo reactor EPR (European Pressurised Reactor) concebido por la francesa Framatome y la alemana Siemens. El actual parque francés de reactores -56 en funcionamiento- no ha de empezar a renovarse hasta el año 2010, pero la construcción de una nueva central conlleva 10 años de obras y pruebas. La decisión gubernamental es la segunda derrota importante para el lobby nuclear desde la llegada al poder de la coalición socialo-ecolo-comunista que, a los pocos días de constituir su Ejecutivo, ya ordenó el cierre del generador experimental Superphénix. Ahora la ministra de Medio Ambiente, Dominique Voynet, ha dicho que Carnet era "inútil" porque "Francia produce desde hace más de diez años más energía de la que consume".
La renovación del parque nuclear deberá hacerse, pues, reconvirtiendo los antiguos reactores al modelo EPR, pero también levantando en centrales de gas o carbón.
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