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El PP de Alcalá gobernará con los presupuestos que dicta la oposición

La oposición alcalaína, formada por nueve ediles del PSOE y siete de IU, impuso ayer a los 11 concejales del equipo de gobierno del PP su propuesta de presupuestos municipales para 1997. A pesar de ello, la izquierda seguirá ocupando los bancos de la oposición y el PP gestionará sus cuentas. Atrás queda el ultimátum que el PSOE local lanzó el pasado viernes a IU por medio de una carta. "No habrá presupuestos si no hay un pronunciamiento público e inequívoco de IU a favor de un gobierno conjunto", plantearon los socialistas. IU no lo aceptó, pero la Federación Socialista Madrileña (FSM) hizo recapacitar a sus correligionarios.Los socialistas alcalaínos no querían convertirse en "un gobierno en la sombra", pero el martes la FSM y la ejecutiva regional de IU convocaron a sus líderes locales a una reunión conjunta. Ayer, el PSOE e IU aprobaron las cuentas sin ningún. compromiso sobre mociones de censura venideras. Lo que sí han acordado es sentarse de inmediato a negociar las cuentas de 1998 e instar al alcalde, Bartolomé González, a que convoque el pleno para su debate antes de fin de año. "Después, si las relaciones son buenas y los compromisos se han ido cumpliendo, hablaremos de otros pasos", manifestó Luis Suárez, coordinador local de IU.

Un 40% más para invertir

El proyecto de la oposición se eleva a 12.720 millones de pesetas, 1. 800 menos de lo que pretendían gastar los populares. Implica un incremento del 10% respecto a los de 1993, que fueron los últimos que se aprobaron. Incluyen 4.792 millones para pagar al personal (un 26% más que en 1993) y 2.006 millones para inversiones (un 40% de incremento).PSOE e IU destacaron entre las inversiones la renovación de la red de agua (600 millones), a la que se acusó de provocar el brote de legionella del pasado otoño, un plan para crear un parque de vivienda municipal que aloje a los casos más urgentes (60 millones) y la comunicación de los nuevos barrios de Espartales y Forjas con el resto de la ciudad más los pasos subterráneos bajo el ferrocarril (160 millones).

El regidor complutense se mostró "satisfecho" del resultado del pleno en el que se aprobaron los presupuestos y manifestó que los de la oposición eran mejor que seguir con cuentas prorrogadas. "Eso sí, si algo no se puede hacer porque no esté en los presupuestos, me encargaré personalmente de enviar a los vecinos que se quejen a los despachos de IU y PSOE", concluyó.

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