Telefónica pide la exclusividad en Argentina hasta el año 2000

Telefónica de Argentina, gestionada por Telefónica de España, ejerció ayer su derecho a mantener la exclusividad sobre el servicio básico telefónico en la mitad de territorio nacional a su cargo, el sur argentino, hasta el año 2000. La empresa presentó formalmente al Gobierno la prórroga de tres años del período de exclusividad mediante su notificación al organismo estatal correspondiemte, la Secretaria de Comunicaciones, y a las las bolsas de comercio de Buenos Aires y Nueva York, donde cotizan los papeles de la empresa.El español Javier Nadal, presidente de la compañía, considera que se han cumplido con creces las metas de inversión y calidad establecidas en el contrato de privatización de ENTEL, la antigua empresa estatal, y no hay otra opción que aprobar la prórroga.

El también español Luis Bustamante, gerente de la compañía gestionada por la Telefónica de España, informó en la conferencia de prensa que la compañía invirtió 6.500 millones de dólares (975.000 millones de pesetas) entre 1990 y 1997 para poner una punto una red calamitosa cuando pasó manos privadas en 1990. En un país donde la evasión impositiva es alarmante, Bustamente destacó que la firma pagó un total de 3.000 millones de dólares en impuestos, cifra que supone el 1,2% de la cantidad total recaudada por la hacienda pública argentina.

Javier Nadal subrayó que se cumplieron sobradamente las metas de expansión de la telefonía básiva fijadas hace siete años en el contrato de privatización de la ENTEL, la disuelta empresa estatal de teléfonos hace siete años. Concretamente, la instalación de líneas álcanzó en 1996 el 448% de lo exigido para ese año. "La Ganancia Acumulada de líneas entre noviemnre de 1990 ny diciembre de 1996 legó al 262% y a 201% de lo impuesto en el capítulo de Penetración en la Red".

A propósito de la apertura del mercado de telecomunicaciones en el 2000, los dos ejecutivos abogaron por la publicación de nuevas reglas de juego antes de que llegue esa fecha y anticiparon que "habrá un escenario distinto".