Perote niega que el Cesid investigara la muerte de Zabalza

El coronel Juan Alberto Perote declaró ayer en el Juzgado de Instrucción de San Sebastián en relación con la documentación incautada en su celda de la prisión de Alcalá de Henares en febrero del año pasado, que hace referencia a la muerte de Mikel Zabalza en el cuartel de Intxaurrondo. El ex agente del Cesid compareció como testigo ante la juez que investiga las circunstancias en las que murió Zabalza, cuyo cadáver apareció ahogado en el río Bidasoa en 1985, y negó que el Centro de Información para la Defensa donde él entonces trabajaba hubiera investigado este hecho.La comparecencia de Perote había sido solicitada por el abogado de la familia Zabalza, Iñigo Iruin, para que aclarase el contenido de los dos documentos referidos al fallecido, que ocupan ocho folios de los ochenta incautados en su celda. Uno de ellos contiene la transcripción escrita de la conversación que mantuvo Perote con el capitán de la Guardia Civil Pedro López Nieto, al que encargó desplazarse a San Sebastián para investigar lo sucedido en el cuartel de Intxaurrondo, donde permaneció Zabalza durante su detención antes de que su cuerpo fuese hallado en el Bidasoa.

En la citada conversación, Gómez Nieto comunicó a Perote su impresión personal de que la versión oficial facilitada por Intxaurrondo era falsa y no tenía sentido, que estaba convencido de que el detenido "se les había ido de las manos, según consta textualmente. El segundo documento contiene el informe realizado por el capitán de la Guardia Civil, absolutamente contrario a la versión oficial que afirmaba la huida del detenido. Gómez Nieto concluye afirmando que la muerte le sobreviene a Zabalza porque "le practican el método denominado bañera y como consecuencia fallece".

Perote negó validez oficial a esta documentación, que, según declaró, tenía procedencia anónima. El testigo tuvo que reconocer ante la insistencia del interrogatorio que habían mantenido una conversación con Gómez Nieto sobre este tema, pero no en los términos del documento.

La realidad

Iruin manifestó al término de la prueba que cuando el juez Garzón intervino esta documentación a Perote éste le expresó su disposición personal a aclarar determinados episodios de la guerra sucia y confirmó entonces que los folios referidos al caso Zabalza "en esencia se correspondían con la realidad".

"Hoy ha tratado de decir lo contrario que en febrero del 96", declaró Iruin al finalizar la comparecencia. "En una situación personal en la que tiene una condena de siete años de cárcel recurrida, su postura de hoy ha sido la de negarlo todo y restar credibilidad a los documentos", explicó. Según el abogado, las contradicciones mantenidas por el testigo provocaron una iniciativa de la juez de Instrucción que remitirá la declaración al juzgado de guardia por si ha incurrido en un delito de denegación de auxilio a la justicia.