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El alcalde de Las Rozas un informe al Estado para saber si puede censurar el boletín de la oposición

Vicente G. Olaya

El alcalde de Las Rozas (45.300 habitantes), Bonifacio de Santiago, del PP, ha pedido al servicio jurídico del Ministerio de Administraciones Públicas que le informe si puede "delimitar el contenido" del boletín municipal socialista, "ante la certeza de que parte de sus artículos pueden tener un marcado carácter político". Igualmente, ha reclamado información al ministerio sobre si el dinero público puede destinarse a financiar esta revista municipal socialista.El PSOE se indigna. Su portavoz, Dolores Rodríguez, comenta: "Esto se llama sencillamente censura. Pero, ¿de qué se cree el alcalde que hablan los boletines de los grupos políticos? Lo que intenta hacer es intolerable".

De Santiago, por su parte, reconoce haber preguntado al ministerio si podía "delimitar" el contenido de la publicación socialista, pero añade que todo fue idea del secretario. "Me dijo que destinar fondos públicos para financiar una revista política podía ser un delito de prevaricación. Y, ante la duda, yo no quiero acabar como el ex alcalde de Córdoba [Herminio Trigo, de IU, que fue inhabilitado por contratar a una persona sin concurso público]".

La polémica sobre el boletín socialista comenzó cuando los grupos políticos locales acordaron poner sueldo a la mitad de sus concejales. La portavoz del PSOE renunció al salario, pero le pidió al alcalde que sus emolumentos (más de tres millones de pesetas) se dedicasen a "gastos diversos" de su formación. Con ese dinero, el PSOE pondría en marcha un boletín llamado Roceños. En mayo salió el primer número, con una tirada de 12.000 ejemplares. Su coste fue de 700.000 pesetas. La publicación atacó duramente al regidor. Le acusó de regalar terrenos públicos a particulares y de querer convertir el municipio en una ciudad dormitorio.

Rodríguez recuerda: "El éxito fue completo. Los vecinos fueron conscientes de lo que estaba haciendo el alcalde. Entonces comenzaron las dificultades. Ya no nos pagó".

De Santiago afirma, sin embargo, que dio la subvención y que hizo las preguntas al ministerio porque el secretario tuvo dudas sobre la operación: "Sólo quisimos informarnos sobre si los gastos de la publicación podían incluirse en el capítulo 2 de los presupuestos". De Santiago reconoce además que el ministerio ya le ha respondido: "Pero no me ha dicho ni sí ni no, por lo que también he financiado el segundo número del boletín". Sobre por qué quería "delimitar" su contenido no da contestación.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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