Telefónica presiona a sus socios de Hispasat para que lance un satélite dedicado a TV digital

Telefónica presiona a sus socios en Hispasat para que el próximo 10 de septiembre aprueben el lanzamiento de un tercer satélite destinado casi en exclusiva a la transmisión de señales de televisión digital. El súbito interés por los satélites de Telefónica, que el año pasado renunció a cubrir una ampliación de capital en Hispasat, responde, a los planes de sus nuevos directivos para introducirse en el negocio de los medios de comunicación. El coste del tercer satélite, que ampliaría la difusión en Europa, supera los 20.000 millones de pesetas. Por su fabricación compiten la estadounidense Hughes, a la que Telefónica quiere vincular a sus proyectos de TV digital, y las francesas. Aerospatiale y Matra.

Telefónica había perdido interés por los satélites y el año pasado renuncio a suscribir enteramente una ampliación de capital destinada a abordar nuevos proyectos en Hispasat y enjugar las pérdidas acumuladas durante los ejercicios de 1994 y 1995. Telefónica aportó 325 millones de pesetas a una ampliación total de 6.000 millones de pesetas, que se cerró en marzo de 1996. Tras la operación, la participación de Telefónica se redujo del 25% al 22,74% del capital y Retevisión, su más directo competidor en el ámbito de las telecomunicaciones, amplió su presencia en el capital hasta el 30,3%. Sin embargo, el súbito interés de la operadora de teléfonos por la televisión digital y el empeño de sus nuevos directivos por imponerse en el sector de los medios de comunicación ha hecho que ahora consideren el lanzamiento del Hispasat 1C como una prioridad estratégica."El interés no es tanto nuestro como de Vía Digital", afirma un portavoz de Telefónica en referencia a la sociedad en tomo a la cual la compañía de teléfonos canaliza su estrategia en el ámbito de la TV digital. Pero es Telefónica la que tiene acceso al consejo de administración de Hispasat y sus representantes los que ejercen ahora como aguerridos defensores del tercer satélite de Hispasat, según fuentes del consejo de administración de la sociedad española de satélites.

Para los demás accionistas de Hispasat (Retevisión, 30%; SEPI, 8%; CDT1, 2%; Argentaria, 19% e Inta, 18%, todos con presencia estatal), el Hispasat 1 C, que estaría en órbita a finales de 1999, "resulta interesante", pero entraña grandes riesgos y exigen las máximas garantías de rentabilidad. Una de sus principales preocupaciones es la financiación del proyecto, considerado "de alto riesgo" por las entidades financieras.

"Si el Gobierno mantiene su propósito de imponer la plataforma de TV digital de Telefónica, el nuevo satélite será utilizado por un único cliente", subraya el portavoz de uno de los accionistas de Hispasat.

"Hispasat goza de una gran crédito en los mercados financieros internacionales y no habrá problemas", aseguró ayer el portavoz de Hispasat. Aún así, a instancias de los accionistas, la sociedad ha entablado negociaciones con Telefónica para hallar fórmulas de financiación, puesto que es la operadora la más interesada en que España cuente con un ingenio de estas características. La opción que se baraja es la e realizar una nueva ampliación de capital, a la que ésta vez sí acudirá Telefónica, y apelar también a los recursos de la compañia. "Apoyaremos las iniciativas que sean buenas para Hispasat", afirmó ayer el portavoz de Retevisión, sociedad que inició en enero de 1996 el primer servicio comercial en Europa de televisión digital por satélite a través de Hispasat.

Ampliar capacidad

Hispasat cuenta ya con dos satélites de comunicaciones 'en órbita. Su nivel de ocupación alcanza casi el 100% después de los contratos que Telefónica ha suscrito para utilizar más traspondedores para la emisión de señales de TV digital y su vida útil termina alrededor del 2004. Precisamente, el objetivo del tercer satélite es aumentar la capacidad de transmisión de señales del sistema. Con él no se pretende sustituir a los que ya están en órbita.Hispasat ha pedido ofertas para la construcción del tercer satélite a las compañías Lock heed, que rechazó la invitación, y Hughes, de Estados Unidos, y a las francesas Aerospatiale y Matra, esta última fabricante del sistema de satélites actualmente en funcionamiento. Las candidatas tienen que presentar sus ofertas antes del 10 de septiembre, fecha en la que está previsto que se apruebe formalmente el lanza miento del Hispasat 1 C y se elija al ganador.