Ribó propone una acción para frenar al coordinador

El presidente de Iniciativa per Catalunya (IC), Rafael Ribó, pidió ayer una acción concertada entre las organizaciones de Izquierda Unida (IU) que discrepan del coordinador general, Julio Anguita, para pararle los pies y poner fin a los enfrentamientos que minan la federación. Ribó retomó uno de sus argumentos más queridos en la pugna dialéctica que mantiene con el líder de IU y recordó que las federaciones del País Valenciano, Navarra, Esquerda Galega y sectores de Madrid tienen también serias discrepancias con Anguita. Pero esta vez fue más allá y pidió que todos ellos alcen la voz para reclamar el retorno al proyecto original de IU.La dirección de IC está convencida de que el "proceso de divergencia" de que habla Anguita cuando se refiere a las relaciones entre ambas organizaciones no es un contencioso bilateral entre ellas. Al revés, cree que es sobre todo expresión de una grave crisis de dirección que afecta a la totalidad de IU.Lo más grave de esta situación es, en opinión de Jordi Guillot, uno de los más destacados dirigentes de IC, que "se ha producido una quiebra total de la organicidad de IU" fruto de la "guerra civil" ' entre partidos y sectores. La orientación seguida por Anguita no obedece, añadió, a los debates de la dirección, sino a lo decidido en instancias informales como el llamado "grupo de Rascafría".

Ribó expuso claramente su reproche: "Quien quiera dirigir el proyecto de IU debe ha cerlo de una manera positiva para la sociedad, con una total transparencia democrática, con voluntad de sumar y no de restar".

Anguita apuntó el jueves en unas declaraciones a Efe que está decidido a que en torno a la V Asamblea general de IU, prevista para diciembre, se produzca "la gran clarificación" entre IU e IC. Afirmó también que IU no está dispuesta a ir con IC a las próximas elecciones autonómicas catalanas si se mantienen las actuales divergencias.

Rafael Ribó, en unas manifestaciones a la misma agencia, rechazó la eventualidad de una ruptura con IU y apostó por emprender en septiembre un diálogo a fondo para reconducir la deteriorada relación entre ambas formaciones. Este diálogo, sin embargo, debe ser mantenido también, en su opinión, por los sectores y organizaciones de IU que hasta ahora no se han involucrado abiertamente en el debate.

"Lo que hace falta es", afirmó, "que sectores de IU que hasta ahora han estado callados o no se han hecho oír con suficiente fuerza comiencen a reclamar que acabe este enfrentamiento que sólo lleva a la tergiversación del mensaje original de IU".

Ribó no citó en esta ocasión a las organizaciones de IU de Castilla-La Mancha y Cantabria, en las que tiene mucho peso el Partido Democrático de la Nueva Izquierda (NI) de Diego López Garrido, abiertamente enfrentadas a Anguita. Pero sí pidió que las federaciones del País Valenciano y Navarra, así como dirigentes de Madrid y Esquerda Galega, "pasen a primera línea" y "reclamen a la dirección de IU que se retome el proyecto original".

Si a todas estas organizaciones se añade la propia IC, resulta que es bastante larga la lista de las que en uno u otro grado disienten de la orientación y, sobre todo, de la forma de dirigir adoptada por Anguita.

La continua batalla verbal entre Ribó y Anguita provocó la intervención del dirigente de los ecologistas catalanes aliados con IC a escala autonómica y municipal, Joan Oms. Este manifestó ayer su firme convicción de que el conflicto entre IU e IC tiene solución y advirtió que un nuevo fraccionamiento de la izquierda catalana sería muy negativo para ella. Pero manifestó también que si este conflicto no se ha resuelto a finales de este año, Els Verds "buscarán otros aliados". En previsión de esta eventualidad, los ecologistas han abierto una línea de diálogo con Esquerra Republicana de Catalunya.