Un hombre, en coma tras recibir el disparo de un rival

Un tiro en la cabeza derrumbó ayer a las diez de la mañana a Nelson de Jesús I. G., colombiano de 25 años con varios antecedentes penales. Le disparó un hombre, aún sin identificar, de una banda rival, en la confluencia de la calle de Alcalá y la avenida de Daroca, según fuentes policiales. Añadieron que el pistolero perseguía a la víctima, que iba en otro coche junto a su novia, tras una discusión entre dos grupos.

Los agentes del grupo de Homicidios de la Brigada Superior de Policía Judicial, sospechan que varios narcotraficantes están detrás del tiroteo. Además, apuntaron que podría tratarse de un ajuste de cuentas.

La bala entró por el cuello de Nelson de Jesús en dirección ascendente. El proyectil salió por el pómulo. El herido fue reanimado por una ambulancia del Samur que le trasladó al hospital Gregorio Marañón. Según los médicos, la víctima tiene seccionada la arteria vertebral derecha, numerosas heridas en la faringe y en la cavidad bucal.

Operación delicada

Ayer tarde, los médicos del hospital Gregorio Marañón llevaron a cabo una delicada intervención quirúrgica en la zona lesionada de Nelson de Jesús para reconstruirle la cavidad bucal, la faringe y el velo del paladar destrozados por el proyectil.El cirujano García Mon declaró a Servimedia: "El herido fue sometido a una traqueotomía para que tenga una vía respiratoria permeable y se le ha puesto un taponamiento en toda la cavidad oral para sujetar la mucosa en su sitio". García Mon agregó que la sección de la arteria vertebral derecha, con posible afección a la columna, era la más problemática ya que podría haber causado daños cerebrales o medulares.

La riña que desencadenó el tiroteo se originó en el interior del pub Cantina, en la calle de Hermosilla, del distrito de Salamanca. Allí discutieron uno y otro grupo.

Nelson de Jesús, su novia y sus amigos, salieron del establecimiento en dos coches. Luego abandonaron el local otras cuatro personas que se montaron en un Jeep Cheroke. Éstos persiguieron al otro grupo hasta alcanzarles en la confluencia de la calle de Alcalá con la avenida de Daroca. Dos testigos contemplaron atónitos como el Jeep arrolló por detrás al coche de la víctima. Nelson se bajo de su automóvil para increpar al conductor que le embistió. Le respondieron con un disparo. Los agresores huyeron en dirección hacia la calle de Alcalá. "Fue visto y no visto, sentimos un golpe, luego el disparo y más tarde un acelerón brutal", señaló un vecino de la avenida de Daroca.

En el hospital Gregorio Marañón se encontraba ayer al mediodía la compañera sentimental de Nelson. La mujer se encontraba muy nerviosa y no paraba proferir gritos. "Maldito, malditos", decía entre lamentos. Dio su versión de lo sucedido a los agentes encargados de la investigación policial.