Los etarras huidos del piso de Durango preparaban una 'campaña de verano'

La policía sospecha que el comando que huyó hace dos semanas del piso franco de Durango, (Vizcaya) era uno de los dos encargados por la dirección de ETA para llevar a cabo la campaña de verano contra el turismo en las costas españolas. Fuentes de la lucha antiterrorista han llegado a esta conclusión en parte por los datos sobre poblaciones de Cataluña hallados en el piso y, además, por la aparente interrupción de la cadena de atentados que se inició el pasado día 9 con los artefactos explosivos que estallaron en Lloret de Mar y en la vía férrea Barcelona-Massanet.

Gorka Palacios Aldai y Oier Eguidazu, dos activistas legales [no fichados] que escaparon hace dos semanas de un piso franco de Durango tras producirse la explosión de parte de una granada, participaron presuntamente en la campaña de verano desarrollada en Málaga, Granada, Córdoba y Jaén el año pasado.Este año, Aldai y Eguidazu podrían también. formar parte de uno de los dos comandos designados por ETA para colocar explosivos en zonas turísticas, según fuentes (le la lucha antiterrorista.

La Ertzaintza halló en el piso de la calle de Fray Luis de Zumárraga, en Durango, un polvorín con explosivos, granadas anticarro y una bomba lapa ya preparada para ser colocada en los bajos de un coche de una persona que no ha sido determinada. Parte de una de granada estalló fortuitamente e hizo escapar a los ocupantes de la vivienda.

En el piso se encontraron anotaciones con los números de teléfono de Renfe y otros medios de transporte, así como referencias a las comarcas catalanas del Maresme, Baix Ebre, Braix Llobregat, Garraf y la Costa Brava, lo que induce a pensar a los investigadores que el comando planeaba colocar bombas en estas zonas.

La Ertzaintza y la policía barajan la posibilidad de que el grupo escapado de Durango fuese el autor de la colocación de las bombas que el pasado día 9 estallaron en Lloret de Mar y en la vía férrea Barcelona-Massanet. Los investigadores interpretaron estos atentados como el inicio de la campaña contra el turismo, pero ésta no tuvo continuidad después de la fuga de Aldai y Eguidazu del piso franco y la consiguiente pérdida del material que almacenaban allí.

Expertos antiterroristas sospechan que el comando descubierto a raíz de la explosión de Durango no es el único al que la dirección de ETA ha encargado la campaña antiturismo. Las mismas fuentes creen que la banda cuenta con al menos dos grupos para esta misión: uno sería el encargado de hacer la siembra de bombas en Cataluña y Valencia, mientras que el otro se desplazaría a Andalucía.

[La fiscal María Dolores Márquez de Prado figura entre los objetivos de ETA, según se deduce de unos documentos localizados por la Guardia Civil tras la liberación de José Antonio Ortega Lara. Según Antena 3 TV, en esos papeles hay una relación de los movimientos y la protección que tiene la ex fiscal de la Audiencia Nacional].