Al menos ocho muertos en un festival aéreo en la ciudad belga de Ostende

La fiesta aeronáutica terminó en tragedia. Al menos ocho personas murieron y más de 37 resultaron heridas -diez de ellas de gravedad- cuando una avioneta del escuadrón acrobático de Jordania se precipitó ayer al suelo durante una exhibición aérea internacional en la ciudad belga de Ostende, junto al canal de la Mancha. El piloto del pequeño biplano, que no consiguió completar bien un loop (hacer un lazo en el aire), no sobrevivió a la caída, que se produjo a as cinco de la tarde (las seis en Madrid). El festival, que debía continuar hoy, ha sido suspendido.

Otras siete personas fallecieron al caer el aparato sobre ellos. Más de 37 espectadores resultaron heridos en el accidente, según confirmó cerca de la medianoche el ministro del Interior belga, Johan Vande Lanotte.En los primeros momentos la confusión fue total. La agencia de noticias Belga, que aseguró citando al gobernador de Flandes Occidental que el total de muertos eran cinco, precisó que el aparato se estrelló cerca de una grada y que la catástrofe desencadenó una ola de pánico entre los espectadores. Todas las ambulancias disponibles en la región fueron enviadas al campo de aviación, y los hospitales puestos en estado de alerta.

Un policía que participó en las operaciones de rescate declaró a la emisora de radio RTBF que le dio la impresión de que el avión había sido arrastrado por una corriente de aire. "Se produjo una ráfaga de viento, alguien volaba completamente solo, hubo un fallo y [el pequeño avión] cayó en medio de la multitud", describió con estilo lacónico el policía, cuyo nombre no fue revelado.

Mandos bloqueados

Varias piezas del avión, algunas de ellas en llamas, alcanzaron de lleno a los espectadores. La multitud comenzó a huir del lugar, produciéndose un gran atasco en las salidas del aeródromo y en las carreteras cercanas. Un testigo aseguró que el aparato parecía tener los mandos bloqueados y otros advirtieron que el accidente podía haber sido mucho peor ya que a escasos metros del lugar donde se precipitó el avión jordano se encontraba un depósito de combustible y un avión (vacío en ese momento) del modelo Boeing.Fuentes oficiales jordanas confirmaron desde Ammán que el piloto fallecido es el capitán Amr Hani Bilal, pertenciente al escuadrón de Los Halcones, la escuadrilla acrobática de la Fuerza Aérea jordana.

La peor catástrofe acaecida durante una exhibición aérea ocurrió en agosto de 1988 en la ciudad alemana de Ramstein. En aquella ocasión perecieron 70 personas después de que tres cazas italianos del equipo de acrobacia Frecce Tricolore (flechas tricolores), chocaran en el cielo. Uno de los aparatos, envuelto en llamas, cayó sobre la muchedumbre que contemplaba el espectáculo.

En junio de 1973, un Tupolev 144, un avión comercial soviético capaz de superar la barrera del sonido, se estrelló en la feria aeronáutica de La Bourget, en París. En el desatre murieron 15 personas.