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Dirigentes socialistas desaconsejan generalizar la alianza con Izquierda Unida

Anabel Díez

Los socialistas van a echar toda la carne en el asador para que triunfe en Galicia una opción progresista frente a Manuel Fraga. El triunfo o fracaso de la operación, basada sobretodo en la alianza con Izquierda Unida, se verá en octubre. Este acercamiento a IU es visto con precaución, e incluso con alarma, dentro de la dirección del PSOE. Diálogo con IU sí; otra cosa será la unidad electoral, que se efectuará siempre y cuando no retraiga el voto socialista. El nuevo líder del PSOE, Joaquín Almunia, fue recibido ayer por el rey Juan Carlos.

"A dos pasos del siglo XXI, hay que acabar con esa antigualla que supone el estilo del Gobierno del PP en Galicia", dijo ayer Joaquín Almunia al término de a reunión de la ejecutiva. El obetivo de los socialistas es acabar con un tipo de Gobierno "antiguo, basado en redes caciquiles, incapaz de ofrecer alternativas e progreso para Galicia". En la reunión del órgano de dirección el PSOE, el candidato socialista -la presidencia de la Xunta de Galicia, Abel Caballero, expuso os detalles del acuerdo con Izquierda Unida de Galicia -en contra del criterio de Julio Anguita- y de otras fuerzas progresistas. Algunos miembros de la ejecutiva, aunque aplaudieron esta operación, llamaron la atención sobre el peligro que tendría la generalización indiscriminada de acuerdos electorales con IU. En la reunión, algunos miembros de la ejecutiva, que piden permanecer en el anonimato, hablaron incluso del retroceso electoral que podría tener el PSOE si apareciera con imagen de "frente popular".

Frente amplio

La estrategia socialista de contar con IU para formar una amplia plataforma progresista pero sin aparecer "amarrados" es uno de los retos que tiene la dirección socialista. En la línea de aparecer no como parte de un frente popular sino de un frente amplio, el líder del PSOE, Joaquín Almunía, se reunió ayer con el secretario general de UGT, Cándido Méndez, y con una representación de Greenpeace. Almunia y Méndez coincidieron en su análisis sobre algunas actuaciones del Gobierno. El líder de UGT aseguró que el Gobierno tendrá "respuesta sindical" si m antiene la idea de subir a los funcionarios en 1998 sólo el IPC. Sí está decidido por parte de, la dirección socialista dar batalla al Gobierno que preside José María Aznar en las políticas de educación y sanidad. Esto se traducirá en la respuesta del PSOE, a las partidas que presente el Ejecutivo para estas materias en los presupuestos del Estado para el próximo año.Donde no habrá pugna con el Gobierno será en la lucha contra el terrorismo. La ejecutiva federal del PSOE reiteró ayer su deseo de no hacer nada que ponga en peligro la unidad de los demócratas frente a los violentos. "Un exceso de protagonismo puede dificultar la unidad, así que los socialistas renunciamos a la foto en primera línea para conseguir esa unidad", proclamó Almunia. El líder del PSOE se reunió por la tarde con el alcalde de Ermua (Vizcaya), Carlos Totorica, militante socialista.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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