Más pop que "funk"
Mientras otra sala madrileña muerde el polvo, víctima de frías ordenanzas municipales, el ayuntamiento de la capital propone un verano musical con espectáculos a 4.000 pesetas, pocos asientos numerados y resguardados por el equipo de seguridad, un incómodo pasillo entre las gradas de los afortunados y un invisible escenario.Como de ello no tienen la culpa los Earth, Wind & Fire, es de ley reconocer que el grupo vino a mostrar lo que viene haciendo desde hace años, aunque sin su miembro fundador: el cantante y compositor Maurice White. El resto de la banda, en cambio, ha decidido tirar para delante, ofreciendo un espectáculo de popfunk -más pop que funk- de pantalones de pinzas, tremendamente alejado del glamour y los excesos estéticos que el grupo abrazara allá por los dichosos años setenta.
Earth, Wind & Fire
Cuartel del Conde Duque. 3.500 y 4.000 pesetas. Madrid, 9 de julio.
Hasta 14 componentes -dos esculturales bailarinas incluidas- para dar un repaso a temas que viven ya en el corazón de todos los que sobrevivieron al ocaso del soul: Let's groove, September, Fantasy o Boogie Wonderland, entre otros. Esta vez el interés radicaba más en el aspecto instrumental del combo, con especial mención al percusionista Ralph Johnson, que no paró de saltar y tocar como los ángeles a lo largo de todo el show, y la ajustada guitarra de Reyno1ds. En el aspecto vocal, se notó la mella de los años en las gargantas del cantante Philip Bailey y los suyos.