CC OO vaticina una protesta general contra la política del Gobierno en el sector público

Comisiones Obreras vaticina un otoño caliente, con movilizaciones y protestas en la calle y los centros de trabajo, si el Gobierno persiste en su actual política para el sector público empresarial, según advirtió ayer Javier Doz, secretario de Comunicación de CC OO, tras la reunión del Consejo Confederal del sindicato, máximo órgano ejecutivo entre Congresos.Doz explicó que CC OO no ha tomado aún una decisión política respecto a la convocatoria de movilizaciones para otoño. Precisó que sus palabras son sólo un diagnóstico de la situación. No obstante, CC OO, UGT y CGT han convocado un paro general en las empresas del sector público para el próximo jueves en protesta contra las privatizaciones.En este sentido, resaltó la situación que están viviendo los trabajadores de la Corporación Siderúrgica Integral (CSI) e Inespal, con procesos de privatización pendientes que pueden conducir a la destrucción masiva de empleo.

El Consejo Confederal de CC OO abordó en su reunión de ayer el problema de la seguridad laboral e instó al Gobierno a poner en marcha una campaña de concienciación ciudadana sobre la prevención de riesgos en el trabajo, similar a la que realiza para prevenir los accidentes de tráfico.

Javier Doz informó que los secretarios generales de UGT, Cándido Méndez, y CC OO, Antonio Gutiérrez, tienen previsto mantener una reunión con el ministro de Economía, Rodrigo Rato, antes de que finalice el mes de julio para comentar los Presupuestos Generales del Estado para 1998. Doz se adelantó a la cita e indicó. que si los Presupuestos de 1998 dan continuidad a los del presente ejercicio, se agudizarían los enfrentamientos en el sector público.El secretario de Comunicación de CC OO manifestó su satisfacción por la positiva evolución de los nuevos contratos indefinidos, que pasaron de una media de 5.000 mensuales en 1996 a casi 80.000 en el pasado mes de junio. Sin embargo, CC OO considera que "aún es pronto para hacer una evaluación rigurosa" de los efectos de la reforma laboral en favor de la creación de empleos.

En ese sentido, el sindicato ELA, mayoritario en el País Vasco, negó ayer que la reforma laboral haya conseguido cambiar el mercado de trabajo y favorecer en concreto, la firma de contratos indefinidos. El último informe de coyuntura laboral del sindicato ELA asegura que la temporalidad en el empleo y la contratación a tiempo parcial se han mantenido estables en el primer trimestre de 1998 y afectan a un 33,7% y al 8% de la población asalariada, respectivamente.