Un universitario muere apuñalado por no ceder el paso en una acera
La violencia juvenil tiene una nueva tumba en Madrid. Fernando Bertolá, estudiante de tercero de Derecho, de 21 años, murió la pasada madrugada en Majadahonda por no ceder el paso a tres jóvenes que caminaban por su misma acera.La víctima recibió una puñalada mortal en el pecho que le alcanzó el corazón. Falleció en el acto. Un amigo que le acompañaba también fue acuchillado en el muslo. Los presuntos agresores son tres jóvenes de Las Rozas, municipio próximo a Majadahonda, según informó la Delegación del Gobierno.
La Guardia Civil localizó al presunto autor del crimen, Antonio L. A., apodado Toni el pelos, cinco horas después en la discoteca Oh! Madrid de la carretera de la Coruña. Los otros dos presuntos cómplices, Ócar S. S., el Yogui, de 20 años, y Faustino L. M., el Mechina, de 19, fueron detenidos más tarde en sus respectivos domicilios. La muerte de Fernando Bertolá movilizó a decenas de jóvenes de Majadahonda, que expresaron su rabia por lo ocurrido y recordaron que llevaban varios meses denunciando la espiral de violencia que azota esta localidad los fines de semana. Los representantes del gobierno municipal de Majadahonda, del PP, negaron la existencia de bandas organizadas en el municipio. "La muerte se ha producido como consecuencia de un conflicto aislado entre jóvenes", señaló el concejal Juan Ossorio.
El crimen se produjo a las puertas de un colegio público de Majadahonda y junto a las dependencias de la Policía Local. La víctima y su amigo acababan de salir de una discoteca. En su camino se toparon con un grupo de tres jóvenes que andaban por la misma acera. Una discusión por ver quién se bajaba de la acera desencadenó la tragedia. La Guardia Civil sostiene que los presuntos agresores, "cargados de copas", iniciaron la pelea. "Uno de ellos fue el que exigió al amigo del fallecido que se apartara de la acera", indicaron.
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El Ayuntamiento de Majadahonda achaca el suceso a la mezcla de "alcohol y armas"
El acompañante de la víctima declaró ayer a los agentes: "íbamos tan tranquilos cuando nos dijeron que nos apartásemos de la acera para dejarles pasar. Les preguntamos por qué se ponían así, y entonces me noté la cuchillada en la pierna". Fernando, la víctima, vio cómo se desplomaba su amigo. Al acercarse hacia él notó algo en el pecho y se desplomó, según el relato de su amigo. El presunto agresor, que no había participado en la discusión verbal, sacó una navaja con una hoja de unos 10 centímetros y clavó el acero en el pecho de Fernando, según la Guardia Civil.Los tres agresores huyeron en dirección a la calle de Gran Vía. Luis, malherido, se desplazó gritando hasta las dependencias de la Policía Municipal de Majadahonda. Una ambulancia de la Cruz Roja se presentó en el lugar del crimen y solicitó auxilio a una UVI móvil del 061 del Insalud debido a la extrema gravedad de Fernando, que agonizaba sobre la acera de la calle.
El joven dejó de respirar a las 2.20, según el parte médico, pese a las labores de reanimación de los doctores. Mientras tanto, su amigo Luis fue trasladado al hospital Puerta de Hierro.
La Guardia Civil y la Policía Local establecieron un cerco en Majadahonda en busca de los agresores. Para ello contaban con la descripción, física aportada por el joven que acompañaba al fallecido. Los agentes averiguaron rápidamente la identidad de uno de los presuntos atacantes. Se trataba de Óscar S. S., de 20 años, un chico obeso conocido con el apodo de Oso Yogui. Fue detenido en su domicilio.
Faustino L. M., de 19 años, alias El Mechina, también fue detenido en su casa. El tercer implicado, Antonio, de 19 años, apodado Toni el pelos, y presunto autor de la puñalada mortal que acabó con Fernando, se marchó a la discoteca Oh Madrid. Los investigadores creen que buscó allí una coartada. Su detención se produjo a las siete de la mañana. Según la Delegación de Gobierno, Antonio posee dos antecedentes policiales por participar en dos reyertas. "Hace dos meses agredió a otro joven en Majadahonda", según denunció ayer la Plataforma contra la Violencia. Los tres presuntos homicidas fueron conducidos a distintas dependencias para que no pudieran hablar entre ellos.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Juan Ossorio (PP), que ejercía ayer de alcalde en funciones, aseguró que durante este fin de semana se había preparado un dispositivo especial de vigilancia debido a que muchos jóvenes celebraban el fin de curso.
Tanto el Ayuntamiento de Majadahonda como la Delegación de Gobierno señalaron que se trataba de un incidente casual. "Lo ocurrido no tiene nada que ver con bandas violentas organizadas o tribus urbanas, sino el peligro de la mezcla de alcohol y las armas", señaló Ossorio. Esta interpretación fue contestada por un numeroso grupo de jóvenes de la localidad, quienes señalaron que el crimen de Fernando es el desenlace de una escalada de violencia en la localidad.
SOS Racismo y Jóvenes contra la Intolerancia señalaron que dos de los tres detenidos forman parte de un grupo ultra de la localidad famoso por sus agresiones. La Delegación de Gobierno negó estas acusaciones.
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