El Corpus nuestro de cada año
La procesión del Corpus de este año no ha sido tan ruidosa como el año anterior. Entonces, los altavoces instalados a lo largo de la calle Mayor atronaron al vecindario con cánticos y aleluyas.Gracias sean dadas por ello al Señor y a los responsables de esta manifestación eucarística.
En esta edición, el problema ha sido otro muy distinto. Con una antelación de más de dos horas a la fijada para la procesión, fue cortado el tráfico automovilístico en la calle Mayor y no se restableció hasta más de hora y media después de que la procesión hubiese llegado hasta la Puerta del Sol.
¿Qué insospechadas razones indujeron a aislar a los vecinos de esta zona y a que los residentes de otras partes de Madrid que utilizan habitualmente la calle Mayor como vía para dirigirse a sus diversos destinos hubiesen de sufrir múltiples y congestionadas desviaciones? ¿Cuándo, al programar la procesión anual va a pensarse en los también sagrados derechos y necesidades viarios de los madrileños?-