Chevénement garantiza a Mayor la ayuda de Francia
"La cooperación antiterrorista entre España y Francia continuará como hasta ahora y, si es posible, se intensificará. Los cambios de Gobierno en uno u otro país son indiferentes", afirmó ayer Jaime Mayor Oreja en París. El ministro español del Interior almorzó con su homólogo del nuevo Ejecutivo socialista francés, Jean-Pierre Chevénement y, tras dos horas de conversación, consideró que no existe "ningún problema, ningún motivo de inquietud". "No hay vacilación, no hay retroceso. En este terreno no hay banderas ni ideologías. La cooperación antiterrorista es un fenómeno irreversible", apostilló.El nombramiento de Chevénement como ministro francés del Interior había creado cierta inquietud en Madrid. El presidente del Movimiento de los Ciudadanos, un pequeño partido de izquierda nacionalista y contrario a Maastricht, llegó al cargo con una imagen de hombre inflexible e imprevisible basada en hechos como su abandono del Ministerio de Defensa, en 1991, con el fin de expresar su rechazo a la guerra del Golfo y en su capacidad para establecer conexiones ideológicas casi simultáneas con personalidades de partidos aparentemente tan dispares como el comunista y el gaullista.
Pero el gesto de ayer fue expresivo. Recién instalado en su despacho, con su equipo aún incompleto y sin que el primer ministro, Lionel Jospin, hubiera presentado aún su programa de gobierno ante la Asamblea Nacional, Chevénement recibió a Mayor para disipar cualquier temor a una posible relajación en la lucha contra ETA. "Hablamos por teléfono el viernes y le comenté que me parecía importante mantener un encuentro inmediato explicó Mayor, "y es lo que hemos hecho".
Los contactos regulares entre los dos ministros tendrán probablemente una pausa durante el verano, hasta finales de agosto o principios de septiembre, "para que Chevénement tenga tiempo de reorganizar el departamento e instalarse en el puesto, y a partir de entonces se volverá al mecanismo normal", según Mayor, quien habló a un grupo de periodistas españoles a su salida del Ministerio del Interior francés. A diferencia de lo que solía hacer su predecesor, Jean-Louis Debré, Chevénement no acompanó a su colega español ante la prensa.
Mayor consideró que se mantendrá el actual esquema de cooperación, basado en los oficiales de enlace [policías franceses en España y españoles en Francia] y en un contacto constante.
Chevénement y él hablaron también de otros problemas comunes, como el terrorismo de los integristas islámicos, de especial interés para Francia, y el control de la inmigración ilegal.
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