La Complutense no permite utilizar a alumnos y profesores el nuevo polideportivo de Somosaguas
Alumnos y profesores del campus de Somosaguas de la Universidad Complutense, donde estudian unos 30.000 matriculados, siguen sin poder utilizar un Polideportivo que se inauguró por segunda vez la semana pasada y se terminó de construir hace más de un año. Los deportistas claman al cielo ante la decisión del Area de Educación Física y Deportes de esta universidad de mantener cerradas al público estas instalaciones. De momento, continúan entrenándose en las antiguas pistas deportivas, que, según califican sus usuarios, presentan "un estado lamentable".
Las dos pistas de baloncesto que utilizan tanto alumnos corno profesores de las cinco carreras de este campus -Ciencias Políticas, Sociología, Económicas, Empresariales y Psicología- presentan unas grietas a la medida de una zapatilla de deportes. Las canastas están prácticamente destrozadas y ninguno de los tableros tiene el mismo nivel."Es vergonzoso que tengamos estas instalaciones en un estado tan penoso y que no nos dejen utilizar un complejo deportivo que acaban de inaugurar y que ya está acabado. Nos han dicho que sólo se utilizará para competiciones oficiales", dice uno de los habituales de estas pistas, que prefirió mantener el anonimato.
Varios jugadores de los que habitualmente practican el baloncesto solicitaron por escrito el pasado abril al Área de Educación Física y Deportes la utilización de la pista del nuevo polideportivo. Pues bien, la respuesta de este departamento, unos días más tarde, fue la siguiente: "Vista su solicitud de utilización del polideportivo del complejo de Somosaguas para jugar al baloncesto, le comunicamos que de momento no procede acceder a lo solicitado. Pudiendo continuar jugando, como vienen haciendo, en las instalaciones al aire libre".
"En cuanto estén disponibles", prosigue el escrito de la universidad, "Ias normas de uso y alquiler del polideportivo se lo comunicaremos, por si resultan de su interés".
Esto último ha enfadado a más de un deportista. "No sólo nos impiden utilizar unas instalaciones que se han instalado dentro de una universidad, sino que pretenden que paguemos por entrenar y por jugar. Quieren hacer negocio a nuestra costa y cobrarnos por jugar", explica un usuario.
Hasta ahora, la utilización de las instalaciones deportivas del campus de Somosaguas, que se reducen a dos pistas de baloncesto, una de fútbol sala, otra de balón volea y otra de tenis, eran gratuitas.
Pagar por jugar
"Nunca hemos pagado por jugar, y que ahora nos cobren me parece un abuso", explicó un alumno aficionado al fútbol. El nuevo complejo deportivo se inauguró por primera vez el 19 de febrero de 1996, cuando el edificio aún no estaba terminado. Al estreno acudieron los altos cargos de la Complutense y del Consejo Superior de Deportes, entidad que ha costeado 160 millones de los 460 millones que costó el polideportivo. Los 300 millones restantes fueron aportados por la Universidad Complutense.Pero los universitarios no llegaron a utilizar estas instalaciones: las goteras inundaron el parqué.
La apertura definitiva estaba prevista para el pasado mes de febrero, según explicó el responsable de Deportes de esta universidad, Jesús Almaraz. Pero tampoco pudo ser. Así que el pasado jueves se anunció, con partidos de baloncesto entre universitarios y los equipos del Real Madrid y el Estudiantes incluidos, su inauguración oficial, a la que volvieron a asistir los responsables del Consejo Superior de Deportes y de la Complutense.
Hasta ahora, los universitarios siguen sin poder entrenarse en este polideportivo, al que critican, además de las goteras" los vestuarios, en los que no cabe ni un equipo completo de baloncesto. "Apenas caben seis personas y siempre suelen jugar dos equipos", dicen los deportistas.
De momento, en el polideportivo sólo se imparten clases de aerobic, a 1.500 y 3.500 pesetas. Y cobran la entrada al vestuario: 50 pesetas por persona.
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