Ahern busca un aliado para un Gobierno estable en Irlanda

Bertie Ahern, líder del Fianna Fáil (conservador), el partido ganador en las elecciones generales irlandesas, inició ayer un turno de consultas con vistas a encontrar el apoyo necesario para formar un Gobierno estable. Pese a que el partido republicano obtuvo 77 escaños, 10 más que en las elecciones de 1992, los pobres resultados de su aliado político, los Demócratas Progresistas, han dejado a la coalición de oposición a dos escaños de distancia de la mayoría absoluta que se sitúa en 83 diputados, una vez descontado el speaker, o presidente, del Parlamento o Dail.Entre las posibles alternativas para asegurar el "Gobierno estable" que Ahern ha prometido, está la de buscar el apoyo de varios independientes. Otra ' hipótesis manejada por los analistas políticos es la de un Gobierno de coalición Fianna Fáil-Partido Laborista. Una opción rechazada de plano por el líder de este último, Dick Spring, especialmente tras el descalabro electoral sufrido el viernes por el partido que ha perdido casi la mitad de los diputados que tenía, quedándose con sólo 17 escaños. Los votantes irlandeses han penalizado al laborismo por integrarse en 1992 en la coalición de Gobierno con el Fianna Fáil.

El cambio de poder en Dublín ha despertado pocas simpatías entre los sectores unionistas de Irlanda del Norte, especialmente críticos con la elección de Albert Reynolds, antiguo primer ministro irlandés, como futuro encargado de las relaciones con Irlanda del Norte.

En términos generales, el Fianna Fáil, fundado por Eamon De Valera en 1926, es un partido que se reclama defensor de los intereses de la comunidad nacionalista en Irlanda del Norte. Mientras, el Fine Gael -que ha visto aumentar de 47 a 54 el número de diputados en estas elecciones- ha optado por mantener una actitud de neutralidad y de respeto hacia la comunidad unionista. Aún así, el margen de maniobra de Dublín en el proceso de paz del Ulster es muy limitado.