El declive francés
Los enfrentamientos que vive Brazzaville desde el pasado día 5 de junio son un nuevo capítulo del declive de, la influencia francesa en Africa. París ha confirmado que, en un tiroteo callejero protagonizado en la capital congoleña "por elementos incontrolados", ha muerto un soldado francés mientras otros cinco resultaron heridos, todos ellos miembros de un comando que reagrupaba los dispersos ciudadanos franceses.Después de la guerra entre tutsis y hutus en Ruanda y de la expulsión de Mobutu del ya ex Zaire, parece que ahora le toca el turno a la República del Congo, otro enclave de la francofonía y de los intereses económicos galos en África. Para varios de los ciudadanos franceses llegados ayer al aeropuerto de París, no cabe la menor duda: "Se ha abierto la veda del francés". Un sacerdote repatriado precisaba que "todo se debe a la política seguida por Francia durante tantos años al otro lado del río", referencia a Kinshasa y a Mobutu.
El petróleo es la principal. riqueza del Congo (nueve millones de toneladas al año). La comunidad francesa, con más de 2.000 civiles y unos 500 soldados, es la más numerosa entre las extranjeras. Muchos de los residentes franceses trabajan para el Orstom, un organismo oficialmente consagrado a la investigación técnica y científica en ultramar. Las explotaciones petrolíferas de la compañía Elf son la expresión más visible de la presencia de la antigua potencia colonial, como sucede en el vecino Gabón del presidente Omar Bongo, que se ha propuesto como mediador del conflicto.
Frangois Mitterrand, durante su segundo septenato y ante el hundimiento de la presencia exterior de la URSS, intentó democratizar los régimenes dictatoriales en los que se habían apoyado los intereses de París desde la instalación del gaullismo en el poder. En Congo, como en otros lugares, la "operación multipartidismo" desembocó en la creación de distintas milicias al servicio de los diferentes líderes.
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