La ministra de Justicia pide respeto para los tribunales, sin "exabruptos ni ataques"

La ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, reclamó anoche en el Club Siglo XXI un "respeto generalizado" a los tribunales, compatible con la crítica, pero sin "ataques personales, vulgaridades ni exabruptos", si bien declinó poner "nombres y apellidos" a los autores de los mismos. La ministra dijo que aplicar la sentencia del Tribunal Supremo sobre los papeles del Cesid "no es sometimiento al Poder Judicial, sino respeto al Estado de derecho".

En respuesta al diputado de Coalición Canaria Luis Mardones, que planteó si el Gobierno debe estar sometido "a la ley o a las decisiones de los jueces" y calificó de "harto discutible" la desclasificación, Mariscal dijo que el Gobierno debe estar sometido "a la ley y no a los jueces", pero son éstos los que pueden decir lo que es legal o no.En su conferencia sobre Gobierno, Justicia y Estado de derecho" Mariscal de Gante significó que el gobierno del que forma parte tiene decidido desde el principio, "no sólo rectificar" sino incluso hacer cuanto esté a su alcance para restaurar un clima "Jurídicamente sano y genuinamente democrático"

La ministra de Justicia fue arropada en su conferencia por los ministros de Trabajo, Javier Arenas; Interior, Jaime Mayor Oreja; Medio Ambiente, Isabel Tocino; Sanidad, José Manuel Romay Beccaria, y Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, así como por el fiscal general del Estado, Juan Ortiz Úrculo.

Para evitar "el desorden y la confusión" que generaría un Ejecutivo con afanes de control sobre los jueces, Mariscal de Gante propuso la fórmula que aplica "el Gobierno de José Maria Aznar", donde "la Justicia no gobierna ni el Gobierno pretende dirigir la Justicia".

En la cena-coloquio, Mariscal aseguró que la decisión sobre el traslado forzoso de la fiscal María Dolores Márquez de Prado es competencia suya, ya que la fiscal sancionada fue nombrada por Justicia en 1980. El fiscal general, Ortiz Úrculo, indicó que no aceptó el traslado del fiscal Ignacio Gordillo al no estar ya en la Audiencia el fiscal jefe con el que mantenía desavenencias. Sobre la opinión en contra del Consejo Fiscal alegó: "Se lo expliqué a los consejeros y lo comprendieron, pero no lo compartieron".