Columbia, Warner, Universal compiten por la Ciudad del Ocio
Tres grandes multinacionales norteamericanas -Columbia, Warner Bross y Universal- están interesadas en levantar la futura Ciudad del Ocio. Hace casi un año, la Comunidad de Madrid compró una finca de 544 hectáreas de suelo rústico en San Martín de la Vega para abrir el "gran parque temático de la España interior", similar a Port Aventura, impulsado por el Gobierno de Jordi Pujol en Tarragona. Para que el proyecto cuaje, la Comunidad busca un banco de inversiones que financie el proyecto. El consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, principal promotor de la idea de la Ciudad del Ocio, mantiene el sigilo sobre el macroproyecto autonómico. Ni siquiera quiere dar nombres de las empresas interesadas por instalarse en la finca de San Martín de la Vega.
Las tres firmas norteamericanas han creado filiales para hacer negocio con los grandes parques de atracciones y están dispuestas a exportar su imaginación y sus millones a Madrid. El trabajo de los colaboradores del consejero de Obras Públicas los últimos seis meses ha sido intenso. Tras comprar las 544 hectáreas de suelo rústico, encargaron a la empresa británica Economics Research Associates (ERA) un estudio de viabilidad sobre el parque temático que ha resultado positivo.
Esta empresa no fue elegida al azar. Es una de las tres primeras compañías del mundo expertas en viabilidad de parques temáticos.
Contacto fluido
El grupo británico Pearson, accionista de Port Aventura, se interesa por Madrid
Sin embargo, los terrenos guardaban una sorpresa. Todo el término municipal de San Martín de la Vega estaba declara do, desde finales de los años ochenta, zona de máxima protección arqueológica, informa Vicente G. Olaya. Por tanto, para llevar a cabo cualquier actuación urbanística, se necesitaba el permiso expreso de la Dirección General de Patrimonio, y máxime cuando se suponía que en el subsuelo del parque temático se ocultaba "una importante villa romana". La Consejería de Obras Públicas no había caí do en ese pequeño detalle cuando eligió el lugar, pero reaccionó a tiempo.Cuando Luis Eduardo Cortés se dio cuenta del error, actuó con prontitud. Se entrevistó con los responsables de la Consejería de Cultura para emprender "excavaciones de urgencia". Un alto cargo de la Comunidad lo explicó así: "No queríamos una plaza de Oriente 2".
Cortés decidió entonces que su consejería pagaría todos los gastos de las excavaciones, y afirmó: "Me encantaría encontrar la villa romana para integrarla en el parque temático: sería el primero del mundo con restos arqueológicos inclui dos", señaló el consejero. Hace aproximadamente un mes, un grupo de arqueólogos comenzó las excavaciones. Los primeros indicios han resulta do negativos.
En el subsuelo sólo han ha llado una acequia visigoda de -30 metros, restos de una edifica ción de piedra de la misma época, hornos del calcolítico (con unos 4.000 años de antigüedad) y una era empedrada construida hace dos o tres siglos.
La buscada villa romana, se gún se ha descubierto ahora, queda fuera de los límites del futuro parque temático. Cortés, en una reciente visita, sólo dijo: "¡Qué pena!".
Pero los inversores extranjeros podrán decidir si apuestan por Madrid sin problemas de conciencia, pues los restos arqueológicos no impedirán que sobre ellos se levanten las gran des atracciones del siglo XXI en la Comunidad.
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