Iturgaiz y Jáuregui critican a Ardanza por acusarles de quebrar Ajuria Enea

Los máximos representantes del Partido Socialista de Euskadi (PSE-EE), Ramón Jáuregui, y del Partido Popular (PP) en el País Vasco, Carlos Iturgaiz, llamaron ayer "imprudente" al lehendakari José Antonio Ardanza por culparles de la quiebra que sufrió el Pacto de Ajuria Enea en la reunión, de agosto del pasado año, en la que se analizó la decisión del Gobierno de no desclasificar los papeles del Cesid. Ardanza, que se sintió arropado por las tres sentencias del Tribunal Supremo en las que se decide la desclasificación, dijo ayer en los pasillos del Parlamento vasco que "los partidos que provocaron la quiebra de la Mesa de Ajuria Enea fueron dos".

Los aludidos respondieron molestos y con contundencia a las acusaciones del lehendakari, coincidiendo en tildar de "imprudente" la actitud y las declaraciones de Ardanza sobre un asunto que sucedió hace ocho meses.

El secretario general de los socialistas vascos explicó que la convocatoria de aquella reunión fue innecesaria porque el tema [la desclasificación o no de los papeles del Cesid] ya estaba en manos de los tribunales y, por lo tanto, era competencia suya, en aquel momento, reorientar o dejar como estaba la decisión del Gobierno de José María Aznar de no desclasificar. Jáuregui aludió a una intención política del PNV al confirmar la convocatoria de la reunión, aun sabiendo que las posturas sobre ese tema eran irreconciliables.

"Ardanza", declaró ayer Jáuregui, "tiene que ser más prudente administrando su papel de presidente de la Mesa de Ajuria Enea. Y no debe de producir ese tipo de reproches porque quien se equivocó fue él". Para el número uno del PSE y consejero de Justicia, la convocatoria de aquella reunión no tenía ningún sentido práctico, provocó un efecto negativo y dividió a los partidos gravemente, "es decir, fue innecesaria".

"Simplemente decir", concluyó Jáuregui "que el lehendakari no debería hacer ese tipo de comentarios pasando factura a nadie, porque si alguien debiera apuntarse alguna factura quizás, fue él".

La segunda fase

La reunión de la que hablaron ayer los tres políticos se produjo el 12 de agosto de 1996. Los partidos comenzaron el año lanzados en el objetivo de imprimir un nuevo carácter a la Mesa de Ajuria Enea, la denominada segunda fase. Se trataba de diseñar un escenario en el que pudiera producirse el final de la violencia. Sin embargo, la tregua de una semana que lanzó ETA en vísperas de la reunión de junio provocó el primer parón en los trabajos de ese foro. La fractura que sufrieron los partidos en agosto los paró definitivamente.Iturgaiz prefirió quitar hierro al asunto, aunque aseguró que "es poco prudente por parte de Ardanza crear una polémica ocho meses después de aquel asunto". Iturgaiz recordó ayer que el PP, al igual que el PSE, se opuso a aquella reunión por considerar que no era el foro adecuado para debatir un asunto que ya había sido encauzado por la vía judicial.