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Portugal presta refugio al dirigente de los GAL Jean Phillippe Labade

El dirigente de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) Jean Philippe Labade, condenado a cadena perpetua en Francia, reclamado por España y actualmente indocumentado, se encuentra refugiado en Portugal, donde goza de una irregular situación legal calificada de tolerado. Labade fue uno de los principales reclutadores de mercenarios para los GAL y uno de los más estrechos colaboradores de José Amedo.Detenido a finales de 1986 en Portugal, Jean Philippe Labade fue condenado a 12 años de cárcel por su participación en los atentados contra los bares Batzoki y Consolation, perpetrados en el sur de Francia en febrero de ese año, pero la legislación portuguesa le ha permitido cumplir poco más de la mitad de esa pena. Desde hace más de dos años se encuentra en libertad provisional y prácticamente protegido por la legislación portuguesa.

Su extradición a Francia está absolutamente descartada porque la Constitución portuguesa impide la entrega de personas condenadas a cadena perpetua y la expulsión a países que, a su vez, pudieran remitirlos a aquéllos. Su extradición temporal a España fue denegada por las autoriades judiciales lusas para que prestara declaración sobre la trama de los GAL y actualmente está pendiente de un proceso de expulsión que nunca se consuma.

Controlado

El dirigente de los GAL vive actualmente en los alrededores de Lisboa, donde trabaja clandestinamente, y está discretamente controlado por el Servicio de Fronteras y Extranjeros.Labade, de 47 años, casado y agente comercial de profesión, vivía habitualmente. en Biarritz hasta que en 1985 huyó del país. Se refugió temporalmente en Andorra, hasta que los agentes franceses y españoles comenzaron a estrechar el cerco sobre sus actividades. Fue entonces cuando se trasladó a Portugal. Su estancia en este país le sirvió para establecer buenos contactos con dirigentes de la Dinfo lusa (servicio secreto militar), que le ayudarían con nuevos reclutamientos para los GAL.

Precisamente, los mercenarios portugueses serían a la postre sus verdugos. La rápida detención de los autores de los atentados contra los bares Batzoki y Consolation (febrero de 1986 en el sur de Francia) destaparon la trama portuguesa de los GAL y las identidades de José Amedo y Michel Domínguez. Esta trama proporcionó las pruebas decisivas para el procesamiento y detención de los dos policías españoles.

Entretanto, el supuesto miembro de ETA José Luis Telletxea Maia, cuya extradición a España fue rechazada por el Tribunal Supremo portugués, está dispuesto a aceptar su expulsión a un tercer país que le garanticen que no será entregado a las autoridades españolas. En declaraciones a la cadena estatal de televisión, Telletxea Maia afirma que le gustaría vivir en Portugal, pero no descarta su traslado a algún país de Suramérica o África que no tenga tratado de extradición con España.

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