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Un civil próximo al PRI, responsable de la lucha antidrogas en México

Un abogado chiapaneco cercano al Partido Revolucionario Institucional (PRI) es desde ayer el encargado de lavar la imagen de podredumbre que rodea la principal institución de lucha contra el narcotráfico en México. Tras la espectacular detención hace semanas del general Jesús Gutiérrez Rebollo por sus presuntos vínculos con el cartel de Ciudad Juárez, el Instituto Nacional del Combate a las Drogas (INCD) vuelve a pasar a manos de un civil, Mario Herrán, que ya ha prometido la total depuración del citado organismo. Eso sí, siempre con los militares de la mano.

El procurador general de la República, Jorge Madrazo, ya dejó entrever que los uniformes verde oliva seguirán combatiendo al narco. Madrazo calificó al tráfico ilegal de drogas como la mayor amenaza para la "seguridad nacional". La frontera entre ésta y la seguridad pública es cada vez más difusa en México. Las presiones de EE UU sobre inmigración y el propio narcotráfico y los temores al proceso de democratización del país, cuyo punto culminante serán las elecciones parciales del 6 de julio, han motivado que los militares ocupen cada vez, más poder.Por el momento, ya están a cargo de la policía del Distrito Federal, y los agentes de los Es tados fronterizos son en su mayoría antiguos soldados. Herrán sentenció ayer: "Me apoyaré en el Ejército".

El nuevo comisionado para el INCD, que ha tenido que someterse a una investigación de los bienes de su familia, a un examen psicológico y un análisis de sangre antes de ser propuesto para el cargo, llega con las tijeras en la mano para cortar por lo sano en materia de corrupción. 0 al menos así se lo ha pedido el presidente Ernesto Zedillo. El descalabro moral para los mexicanos y el escalofrío que recorrió el espinazo de los responsables de la lucha contra el narcotráfico en EE UU -el general Gutiérrez Rebollo -costeaba sus caros apartamentos y sus relojes Cartier con las propinas del capo Amado Carrillo- estuvieron a punto de lograr que Washington forzara la conversión del INCD en un clon de la DEA estadounidense.

La Admistración mexicana apeló a la soberanía para mantener la actual estructura del INCD. Esta institución está integrada dentro de la Procuraduría General de la República (PGR, un híbrido entre Fiscalía y Ministerio de Justicia) y dista mucho de la independencia y secretismo que caracterizan a la DEA. Sus agentes, especialmente desde el affaire Gutiérrez Rebollo, están salpicados con la imagen de la ineficacia y la corrupción. Estados Unidos aplaudió ayer el nuevo nombramiento.

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