"Causa natural"
Los tres peritos designados por el juzgado concluyen que la muerte de Susana se debió a causas naturales. A continuación, un resumen del informe: Cremallera del pantalón. Estaba forzada. Pero no se puede determinar el origen de esa violencia, que no necesariarnente tiene que deberse a una agresión física. La rotura se pudo deber a la acción cotidiana de ponerse o quitarse la prenda, a la manipulación del cuerpo después del fallecimiento (caída, enterramiento, desenterramiento); a la manipulación de la prenda en la autopsia, para retirarla del cuerpo. La prenda estaba muy usada.
Tierra en las botas. En la escombrera en que fue hallada se había producido un gran destierro cuando se tomaron las muestras. Hubo que sacar una muestra de la Zona colindante, y, por ello, no se pueden establecer conclusiones válidas.
Dientes rotos. La lesión que presenta (la pieza dentaria, nú-mero 53) en su borde oclws,al es el resultado de una abra,sión mantenida durante largo tiempo, al contactar de forma inadecuada con otro diente. Sobre la fractura del incisivo centralsuperior izquierdo, indican: "El mecanismo de producción más probable es el de un golpe sobre el mentón (de abajo arriba). Pero no se ha podido probar si esa lesión se produjo antes o después de la muerte. Llama la atención, con todo, la ausencia de manchas de sangre en la bufanda, cazadora... Si esa violencia hubiese sido antes de la muerte, habría sangrado y manchado alguna prenda.
Orificio en el cráneo. "En la segunda autopsia hallamos en el cráneo un orificio redondeado, que no se vio en la primera autopsia. El hecho de que no existan manchas de sangre en la ropa, de que no se hayan en contrado heridas vitales en el cuero cabelludo, de que no sea hemorragia cerebral de origen traumático y, sobre todo, el que el orificio encontrado no existiera cuando se realizó la primera autopsia avalan que su origen debe situarse en una manipulación posterior del cráneo a lo largo de las múltiples manipulaciones a que ha sido sometido. En todo caso, el golpe fue dé escasa intensidad. Por otra parte, "no existe ningún dato científicamente válido que indique que se ha producido una violencia externa sobre el cuello" [la nuez estaba rota].
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