Gobierno y oposición

Me faltaba oírselo a él y se lo he oído. Estaba presenciando la sesión de control al Gobierno cuando él, como único argumento para justificar un nombramiento contrario a los principios que se había marcado, manifestó eso que vengo oyendo profusamente de labios de gente que simpatiza con el Gobierno: "Ustedes no tienen autoridad moral para hablar de política de nombramientos.Quiero creer, pues lo contrario sería muy grave, que los que así opinan no pretenderán que el PSOE no ejerza la función para la que ha sido habilitado hace menos de un año por nueve millones y pico de españoles, que han delegado en dicho partido su autoridad moral y material.

Quizá lo que quieren decir es que los integrantes del PSOE deben tener problemas de conciencia al achacar al Gobierno similares comportamientos a los que tuvieron ellos recientemente. Puede que tengan razón. Pero creo, sinceramente, que el presidente del Gobierno debe tener los mismos problemas de conciencia en el ejercicio de su función; sabrá que son muchos los españoles, incluso entre los que le votaron, que piensan que no está capacitado para dicho cometido.

Por todo ello, me atrevo a solicitar tanto al Gobierno como a la oposición que se dediquen a ejercer sus respectivas funciones, reconociéndose mutuamente la autoridad moral y material otorgadas por sus respectivos electores.-